Calles cubiertas con residuos de carbón, niños y adultos respirando restos de este material, y un mar contaminado por la antracita; así es la vida de los ciudadanos del distrito de Salaverry, en la ciudad de Trujillo, quienes durante años vienen soportando la contaminación ambiental ocasionada por las empresas carboneras y transportistas que diariamente trasladan el mineral.
¿Pero cuáles son las empresas responsables de esta problemática? La República llegó hasta la zona afectada y conversó con los pescadores y pobladores, quienes mencionan que la contaminación es considerable y que entre las culpables se encuentran las empresas Juanjo, Susuveca y Archean Andean Anthracite.
Fausto Casimiro Polo Cruz. Foto: Sergio Verde.
Fausto Casimiro Polo Cruz, expresidente del gremio de pescadores artesanales del Puerto de Salaverry, expresó su preocupación por el impacto negativo que esta situación tiene sobre el sector pesquero.
Señala que los operarios de las empresas carboneras realizan la descarga del mineral en los barcos al aire libre, sin proteger adecuadamente el proceso, lo que lleva a la dispersión de residuos y, en consecuencia, contamina el mar y causa la muerte de los peces.
Cultivos de casas contaminados. Foto: Sergio Verde.
“La manera de descargar el carbón es rústica. El mineral lo tiran a un container en el muelle y lo suben mediante unos recipientes. Ellas (empresas carboneras) no hacen ninguna modificación respecto al carbón y todos los pobladores de la ribera y la avenida estamos contaminados”, dijo.
Sin embargo, los pescadores no son los únicos que padecen las consecuencias de la contaminación ambiental. Los pobladores de la zona Costa Verde del centro poblado Miramar, que se ubican entre los límites de los distritos de Salaverry y Moche y que viven frente a la carbonera Juanjo, denunciaron que, debido a la operatividad de la empresa, varios adultos mayores sufren de enfermedades respiratorias.
Empresa carbonera Juanjo. Foto: Sergio Verde.
“El carbón nos afecta bastante y por esos motivos sufrimos de dolor de garganta. Desde que llegó esa carbonera (Juanjo) todos nos enfermamos”, contó a este diario Mary Florindez Malqui, vecina de la zona.
En esa misma línea, Pedro Gómez, miembro del comité de gestión contra las carboneras, señaló que la empresa Juanjo comenzó a operar hace dos años y, desde entonces, las viviendas, las viviendas se han visto afectadas por el polvo generado por el almacenamiento y la descarga del mineral.
Camiones carboneros de Trujillo. Foto: Sergio Verde.
“La empresa Juanjo viene operando desde noviembre de 2022. Al principio era algo pequeño, pero se ha expandido. Nuestras paredes están completamente negras, llenas de polvo de carbón”, agregó.
De igual la manera, el agua potable y hasta las plantas se han visto afectadas por la contaminación proveniente de las carboneras. “Las plantas están negras y cuando llenamos nuestros baldes con agua, se llenan de polvo de carbón”, mencionó Isela Barreno Angeles, otra afectada.
Otro factor que contribuye a la contaminación es el paso de los vehículos que transportan carbón. Uno de los pescadores afectados explicó que los vehículos que transportan el mineral dejan caer el carbón en el camino, lo que causa la dispersión de partículas que terminan contaminando la rivera y las zonas aledañas del distrito.
“El carbón lo transportan en volquetes con una manta que no cubre bien el mineral y termina cayéndose en la pista. Eso no ven las autoridades. Eso perjudica a los salaverrinos”, comentó.
Pies de menores llenos de carbón. Foto: Sergio Verde.
Además, las calles, veredas y hasta la pista se tiñen de negro, lo que causa molestias a los pobladores que deben limpiar los interiores de sus casas en más de tres oportunidades.
“El carbón tiñe nuestras casas. Yo tengo que limpiar entre tres a cuatro veces mi casa. Ni siquiera puedo tender mi ropa, porque se ensucia rápidamente”, relató Clara Ayala Dávila, una madre de familia que se ve obligada a limpiar varias veces los dos niveles de su vivienda para evitar el polvo del mineral.
De otro lado, el exdirigente de los hombres de mar, Fausto Polo, señala que los envíos de carbón han crecido en los últimos años, lo que empeora cada día la situación de salud de los salaverrinos.
Pescadores afectados. Foto: Sergio Verde.
“Cada vez los embarques son más grandes. En Salaverry se realizan entre dos y tres embarques por semana. Es decir, entre 30.000 y 40.000 toneladas en cuatro o cinco días que carga un barco. El traslado del carbón es de día y de noche. La contaminación es grande. Nos están malogrando nuestra salud. Tenemos personas de la tercera edad y niños que tiene carbón en los pulmones”, añadió.
Ante esta problemática, el pescador Fausto Polo Cruz informó que en 2023 interpuso una denuncia ante la Fiscalía del Medio Ambiente, explicando que las empresas carboneras están contaminando el agua y aire del distrito. Sin embargo, a la fecha no hay ninguna respuesta al respecto, por lo que optó por denunciar a la fiscal Lastenia Acuña Raza por incompetencia ante la Autoridad Nacional de Control del Poder Judicial (ANC-PJ).
“Yo he presentado un documento hacia la ANC porque la fiscal (Lastenia Acuña) no hizo su trabajo y hasta ahora no hay nada. Voy a tener que ir a la Fiscalía del Ambiente y al Ministerio Publico para poder ver qué respuesta me dan. Ellos tienen que darme una respuesta”, mencionó.
Asimismo, dijo que las autoridades locales y regionales ya están al tanto de la situación ambiental, pero a pesar de ello, ignoran el problema.
“La contaminación es grande y las autoridades no hacen nada, a pesar de que yo he presentado un informe a la subprefecta distrital, a la subprefecta de Trujillo y al gobierno regional explicando lo que sucede, pero nadie dice nada”, señaló.
Menores escolares manchados de carbón. Foto: Sergio Verde.
Polo Cruz, recuerda que en 2021 presentó un informe a la exalcaldesa de Salaverry, Mónica Betancourt, para explicarle la situación de la contaminación en la bahía del puerto. Además, el gremio de pescadores se reunió en tres ocasiones con el gobernador César Acuña Peralta, quien se comprometió a emitir una ordenanza que exigiera la circulación de volquetes encapsulados; sin embargo, esa promesa no se llevó a cabo.
Reubicación de carboneras
Por su parte, el gobernador regional de La Libertad, Cesar Acuña Peralta dijo que, en su calidad de autoridad, ya consiguieron un terreno de más de 200 hectáreas ubicado en la provincia de Ascope, alejado de la ciudad, donde las empresas carboneras pueden operan con normalidad y sin perjudicar a la población afectada.
“El gerente de Chavimochic ya tiene identificado un terreno grande de entre 200 a 300 hectóreas para reubicar a las carboneras. Nosotros ya hemos buscado una solución, y la solución es decirles a estos señores (dueños de las empresas carboneras) que ya tienen un espacio donde hacer su actividad; pero tampoco lo podemos desterrarlos. Lo que debemos hacer es brindarles la oportunidad de seguir trabajando en lugares que no infringen la contaminación ambiental”, aseveró la autoridad.
Según los pescadores de la zona, Salaverry Terminal Internacional (STI), terminal del norte de La Libertad donde decenas de vehículos embarcan y descargan el mineral del carbón, es otro de los responsables de la contaminación.
Pescadores se reunieron con César Acuña. Foto: Sergio Verde.
Fausto Polo Cruz reveló que en el 2021 envió un oficio al gerente general de la empresa privada Salaverry Terminal Internacional (STI), Diego Casinelli Montero, para exigirle un cambio en su propuesta de transporte del mineral, ya que estaba generando contaminación en el aire y agua; sin embargo, no recibió respuesta a su solicitud y, en cambio, obtuvo el término del apoyo para el desembarcadero pesquero artesanal.
¿Pero qué hacer para frenar este problema? Frente a la contaminación ambiental causada por el carbón, Fausto Polo Cruz, exdirigente de los pescadores artesanales, exige que las empresas carboneras modifiquen su forma de transportar el mineral. Mientras que, los pobladores piden la expulsión de las empresas carboneras.
“Estas carboneras deben utilizar vehículos capsulados y, en el muelle, instalar un sistema de tuberías absorbentes para que el mineral se transfiera directamente del barco de manera oculta, evitando así la contaminación del mar”, puntualizó.