Desde las canchas de fútbol de Huancayo hasta los talleres mecánicos más innovadores de Perú, la vida de Juan José Macuri es un testimonio de éxito. Aunque su temprana pasión por el fútbol le prometía un futuro en este deporte, fue el legado familiar y un consejo paterno lo que lo llevó a descubrir su verdadera vocación: la mecánica automotriz. Hoy, con una carrera consolidada en el sector, destaca por su liderazgo en proyectos innovadores y su contribución a la eficiencia operativa en la industria minera.
Juan José Macuri, mejor conocido como 'Juanjo' entre sus amigos, nació en Chosica y se mudó a Huancayo a los 4 años. Su infancia estuvo marcada por el amor al fútbol y tuvo una buena relación con su padre, quien influenció en su interés por el mundo automotor.
"Al inicio, estuve en talleres informales que hacían mantenimiento a buses. Después, mi papá trabajó para la empresa La Merced y allí había talleres que incluso eran concesionarios de Scania; entonces, pude ver calidad y procedimientos del trabajo automotor. Eso me ayudó bastante a mi formación" recordó Macuri en una entrevista para la agencia Andina.
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Desde joven, 'Juanjo' se sintió atraído por el fútbol, y soñaba con alcanzar la gloria en la máxima división del balompié nacional. Su talento y dedicación lo llevaron a destacar en este deporte desde la secundaria. Participó en competiciones regionales y departamentales con el equipo Deportivo Municipal de El Tambo.
"Los entrenadores de la selección de mi colegio me promovieron al Deportivo Municipal de El Tambo, un equipo que participaba en la Copa Perú. Yo disputé la etapa regional y departamental de ese torneo contra clubes como Deportivo Coopsol. Jugué a ese nivel desde los 18 años y lo hacía de volante creativo o delantero. Quería ser futbolista profesional, pero ahí es donde viene la sabiduría de mi padre", manifestó Juan en una entrevista para Andina.
Macuri ha trabajado para empresas renombradas como Multimarcas, Nissan Maquinarias, Divemotor de Mercedes Benz y Automotriz Central del Perú. Foto: Andina
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La decisión de estudiar Mecánica Automotriz en Senati surgió luego de un momento de reflexión guiado por su padre, quien le aconsejó buscar una carrera más estable y además le señaló los riesgos de dedicarse al fútbol, ya que era una carrera que estaba marcada por las lesiones y la incertidumbre.
"Me decía 'olvídate del fútbol y busca una carrera'. Me preguntó qué quería ser. Le respondí que me gustaba la mecánica, los carros y él me dijo 'ahorita estamos cortos de economía, pero busca un instituto que podamos pagar y nos acomodamos'", expresó el egresado de Senati.
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Macuri ha trabajado para empresas renombradas, como Multimarcas, Nissan Maquinarias, Divemotor de Mercedes Benz y Automotriz Central del Perú —concesionario de Volvo—, entre otras. En cada posición, ha demostrado su habilidad para liderar, innovar y mejorar los procesos y servicios.
"Antes, los volquetes que trasladan mineral bajaban a la ciudad para pasar por el taller y se perdía tiempo. Yo he implementado talleres pequeños en las mismas minas para darles soporte a los volquetes. Mi cargo actualmente es jefe de contratos Inhouse", explicó 'Juanjo'.
Hoy en día, complementa su experiencia profesional con estudios en Ingeniería Industrial. Esta decisión refleja su deseo de profundizar en los procesos y la mejora continua, áreas claves para su rol en la industria automotriz.
Juan José Macuri en Senati. Foto: Facebook
"Decidí estudiar Ingeniería Industrial porque está dedicada a los procesos y a la mejora continua. Eso es lo que siempre he buscado. Siempre había muchas cosas por implementar en las empresas que he trabajado, y yo decía que necesito reforzar en mi perfil para ver esto, averiguando pude determinar que esa carrera se acomodaba a lo que yo necesito", finalizó.
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Las carreras de SENATI pueden llegar a durar desde 1 año y medio a tres años. Esto dependerá de la especialidad que elija el alumno.