Un informe de la Contraloría señaló que médicos del Hospital Docente Belén de la provincia de Lambayeque laboraban en otras instituciones en los horarios donde debían estar trabajando en dicho nosocomio. Se trata de Luis Enrique Ríos Morante, jefe del Departamento de Medicina; Brian Jensen Montenegro Díaz, urólogo del Departamento de Cirugía; y Víctor Martín Santa Cruz Quiñones, traumatólogo de Departamento de Cirugía.
El ente de control concluyó que los tres médicos se ausentaban de sus turnos obligatorios para ir a trabajar en otros establecimientos, pese a que registraron marcaciones de entrada y salida en el reloj biométrico del nosocomio Belén. Dicha situación ocasionó un perjuicio económico de S/ 9.652 al Estado, pues percibían sus remuneraciones completas sin brindar atenciones a pacientes.
En el caso de Santa Cruz Quiñones, la Contraloría precisó que se ausentó en el nosocomio para laborar como docente en la Universidad Señor de Sipán (USS). Esto ocurrió, por ejemplo, entre junio y julio de 2022, donde el galeno no cumplió con su jornada completa en el Belén.
De igual forma, Ríos Morante tampoco cumplió con prestar servicios médicos y acudió a ejercer docencia en la USS, durante noviembre y diciembre de 2022. Mientras Montenegro Díaz no cumplió con su jornada laboral en el Belén para irse a trabajar a la clínica Metropolitana de Chiclayo, entre junio y noviembre de 2022. Es decir, el médico marcó su ingreso y salida de nosocomio y, de forma simultánea, ejerció labores en una clínica privada.
Además, la institución de control identificó marcaciones de asistencia incompletas de 29 médicos del hospital Belén, de los servicios de ginecología, medicina y cirugía, durante 1106 jornadas de trabajo, entre junio y diciembre de 2022, con un perjuicio económico de S/ 348.350.
No reportaron. La Contraloría responsabilizó a funcionarios de la Unidad de Recursos Humanos del Hospital Belén por no identificar las inasistencias de los médicos y elaborar informes sobre dichas faltas a fin de que se hagan los descuentos.