El fenómeno El Niño Costero es una amenaza para Chiclayo debido a las consecuencias que originaría en las redes de agua potable y alcantarillado que no operan al 100% y tienen entre 50 y 70 años de antigüedad. En este contexto, el Colegio de Ingenieros de Lambayeque (CIL) alertó sobre una posible catástrofe en el sistema de saneamiento.
Chiclayo es una ciudad con casi 400.000 personas; además, es considerado el eje turístico y comercial de la región Lambayeque que une a Cajamarca, La Libertad, Piura, Amazonas y Tumbes. Sin embargo, su sistema de saneamiento es precario y vetusto, puesto que, a la fecha, no se ejecutan obras integrales y solo hay paliativos que no aseguran el funcionamiento eficiente, ni siquiera en época sin lluvias.
La Entidad Prestadora de Servicios de Saneamiento de Lambayeque (Epsel) administra el servicio con más de 120.000 usuarios y junto con la Municipalidad Provincial de Chiclayo (MPCH) son los responsables de impulsar y ejecutar obras en procura del bienestar de los chiclayanos.
Carlos Burgos, decano del Colegio de Ingenieros de Lambayeque (CIL), sostuvo que el sistema de saneamiento colapsaría por el fenómeno El Niño Costero. "No basta tener el 60% de redes operativas, ya que el sistema opera de manera concatenada, con los colectores, emisores y las dos plantas de tratamiento de desagüe, como es Pampa de Perros y San José", precisó a La República.
Asimismo, indicó que la red de alcantarillado no cumple con sus funciones en época sin lluvia. Considerando ello, este panorama empeoraría con las precipitaciones pluviales, tal como se reflejó en el fenómeno El Niño Costero de 2017 y el ciclón Yaku en marzo de 2023. Tras las lluvias de inicio de este año, en la región Lambayeque, se dejó 49.000 familias afectadas y 19.000 damnificados. En el caso de las viviendas, 1.546 quedaron destruidas; 3.111, inhabitables; y 13.703, afectadas. Por otro lado, se registró S/508 millones en pérdidas económicas.
"Chiclayo se convertiría en una 'cloaca' ante lluvias de El Niño Costero a causa del saneamiento colapsado, lo cual es un peligro para la vida de las personas y el desarrollo de las actividades económicas. Chiclayo está en peores condiciones que Trujillo y Piura", subrayó Carlos Burgos.
Las lluvias causan grandes pérdidas y daños en la infraestructura. Foto: La República
El último fenómeno de El Niño Costero fue en 2017, cuando Chiclayo soportó lluvias de 35 litros por metro cuadrado en 12 horas. Han transcurrido más de 6 años y no se avanzó en infraestructura de saneamiento.
Son más de S/110 millones de soles distribuidos en obras de envergadura que se encuentran paralizadas e inconclusas. A continuación, se brindan algunos datos sobre estos proyectos:
Los proyectos que no se finalizarán antes del fenómeno El Niño Costero están valorizados en más de S/2.100 millones. Estos son los siguientes:
En las lluvias por el ciclón Yaku se formaron aniegos en diferentes puntos de Chiclayo. Foto: composición LR
La alcaldesa de la Municipalidad Provincial de Chiclayo (MPCH), Janet Cubas, refirió que son 114 puntos críticos por lluvias. Por su parte, el jefe de la Oficina Sur de la Entidad Prestadora de Servicios de Saneamiento de Lambayeque (Epsel), Roberto Vallejo, precisó que son 35 de muy alto riesgo y 40 de alto riesgo.
Puntos críticos por lluvias:
El decano del Colegio Médico y el jefe de la Oficina Defensorial de Lambayeque, Jimy Agüero y Julio Hidalgo, respectivamente, coincidieron al señalar que la crítica situación de los desagües empeorarían con las lluvias, lo cual significaría un riesgo a la salud pública y contaminación ambiental.
"Es lamentable que la corrupción, la ineficiencia y la falta de planificación urbana ponga en riesgo a los ciudadanos, cuya salud está en peligro de registrarse afloramiento de aguas servidas en El Niño Costero", recalcó Jimy Agüero.
En esa línea, manifestó que el número de casos de dengue, leptospirosis, enfermedades a la piel, males estomacales y respiratorios aumentarían si el problema del alcantarillado se agrava con las lluvias.
Janet Cubas, alcaldesa de la Municipalidad Provincial de Chiclayo (MPCH), informó que construyeron 112 buzonetas de concreto armado en puntos críticos de mayor acumulación de aguas pluviales. Además, se colocará tubería en las veredas para evacuar el agua de lluvia a los canales que existen en la ciudad.
También mencionó que el Ministerio de Vivienda, con una inversión de S/ 10 millones, construye las llamadas pozas de tormenta o piscinas temporales en los siguientes puntos: parque zonal del distrito de La Victoria, parque Los Mecánicos en el distrito de José Leonardo Ortiz, parque Las Pirámides en Chiclayo, urbanización Federico Villarreal, sector La Videnita, urbanización El Amauta y el pueblo joven Santo Toribio.
"El objetivo de las pozas subterráneas es evacuar las aguas de lluvia y evitar su acumulación en las calles", anotó Cubas.
La autoridad municipal enfatizó que asumió los pasivos de la corrupción y la ineficiencia de sus antecesores: Roberto Torres y David Cornejo, presos por delitos de corrupción; y Marco Gasco, investigado por el mismo ilícito.
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El jefe de la Oficina Sur de Epsel, Roberto Vallejo, aseguró que la EPS desarrolla acciones para mitigar los efectos que pueda ocasionar las lluvias de El Niño Costero en el sistema de saneamiento, el cual es unitario, es decir, no es apto para recibir agua de precipitaciones.
"Hay 60% de redes operativas, pero son vulnerables ante las lluvias. Se realizan trabajos y se adquiere logística ante una emergencia. Se tiene un presupuesto de S/5 millones", afirmó. Finalmente, pidió a los ciudadanos no arrojar objetos a los desagües, puesto que afecta su funcionamiento.
En la noche del último miércoles, los distritos de las provincias de Lambayeque y Ferreñafe soportaron lluvias intensas, que causaron alarma en los ciudadanos, que exigen obras a las autoridades para afrontar el impacto de El Niño Costero que pronosticó la Comisión Multisectorial encargada del Estudio Nacional del Fenómeno El Niño (Enfen) parta diciembre 2023 a marzo de 2024.
Las lluvias del miércoles 4 de octubre fue con relámpagos y truenos, lo que trajo a la memoria de los lambayecanos las precipitaciones del ciclón Yaku de marzo de 2023 y El Niño Costero de 2017, que originaron desastres y dejaron miles de damnificados.
El integrante de la Comisión de Grandes Proyectos del Colegio de Ingenieros de Lambayeque (CIL) Marco Tulio Tapia, planteó reabrir los drenes 3600, 3720, 4500, 4400 y 3100 para captar el agua de lluvia que se recolecte en diferentes sectores de Chiclayo. Además, sugirió al Gobierno Regional de Lambayeque (GRL) construir una compuerta de cemento y fierro en el canal Chiclayo, que bifurque las aguas que provienen del río Lambayeque, y de esta manera no ingresen a los canales Yortuque, Cois, Pulen