En la ciudad de Trujillo, los organizadores de conciertos se han visto afectados por el accionar de las bandas de extorsionadores que les vienen exigiendo cupos de dinero para dejarlos trabajar tranquilos y no atentar contra las orquestas que promueven o el público que acude a sus eventos.
Un promotor, en diálogo con La República, contó que los delincuentes han establecido la tarifa de S/5.000 por fiesta a cambio de brindarles seguridad al espectáculo.
Dinamita.
La manera de operar es la siguiente: empiezan llamando a los dueños de los grupos musicales para amenazarlos con atentar contra sus vidas, luego siguen con los promotores de los shows para atemorizarlos con matarlos si no pagan.
Cuando no cumplen con los desembolsos exigidos, los maleantes se las ingenian para hacer ingresar un artefacto explosivo y detonarlo dentro del local del evento.
Grupos de la talla de Armonía 10 de Piura, Agua Marina de Sechura, Corazón Serrano, Los Caribeños de Guadalupe y otros han sufrido los ataques de los extorsionadores durante sus conciertos.
La más reciente agresión de estos delincuentes se produjo el último 1 de enero, en horas de la noche, cuando se desarrollaba una fiesta en la explanada de la playa de Huanchaco, con el grupo de moda Agua Marina.