Cinco de cada diez armas que ingresan al país provienen del mercado negro
Delincuencia sin freno. Son utilizadas para robos y sicariato que continúan en alza. Según la Sucamec, estas armas entran por zona fronteriza de Bolivia y Ecuador. Hace faltan más operativos.
Rikson Escobal tenía 21 años cuando fue asesinado por unos delincuentes luego de resistirse al robo de su celular, en San Martín de Porres (SMP). Él fue una de las miles de víctimas que dejan a diario el uso de armas de fuego en asaltos, el cual incrementó en un 28,1% entre el 2012 y el 2021, según el INEI.
De acuerdo con el especialista de la Gerencia de Armas, Municiones y Artículos Conexos de la Superintendencia Nacional de Control de Servicios de Seguridad, Armas, Municiones y Explosivos de Uso Civil (Sucamec), Wilmer Delgado, el 55% de las armas de fuego que ingresan al Perú proviene del contrabando o del mercado ilegal; es decir, 5 de cada 10 armas que no han sido registradas por la Sucamec. Esto con la finalidad de ser utilizadas en actos delictivos.
Para el exministro del Interior Wilfredo Pedraza, este mercado se provee principalmente de las armas que ingresan mediante la zona fronteriza de Bolivia y Ecuador. Asimismo, el 30% proviene de pérdidas o robos a personas que cuentan con licencia para portar armas.
Indicó que una de las causas que llevan al fortalecimiento del mercado negro es el empleo de armas de fuego en hechos delictivos, como homicidios. Y es que durante el año 2021 hubo 2.166 investigaciones vinculadas a asesinatos. También 2.367 lesiones por estos dispositivos.
Por su parte, el exministro Rubén Vargas cuestionó la facilidad con la que los delincuentes obtienen un arma de fuego en el país actualmente.
“¿Por qué es tan sencillo? Hay que preguntarnos cuál es el papel que tiene la Sucamec en el control a las empresas importadoras, agencias privadas que brindan seguridad y otros puntos donde las armas pueden pasar de legales a ilegales”, comentó. Agregó que para controlar los índices de delincuencia, se deben frenar primero los mercados ilegales de armas.
Sucamec, por su parte, señaló que viene fiscalizando a las empresas autorizadas para vender armas de fuego. “A cada arma legal se le asigna un registro único, a diferencia de las que proceden del mercado negro, que son difíciles de identificar porque sus características (series) han sido borradas”.
En los últimos tres años, la Sucamec ha recuperado alrededor de 28.658 de armas de fuego. Solo en lo que va del 2022 se logró decomisar o incautar un total de 10.619 pertrechos.
Las armas de fuego de procedencia ilegal son incautadas, internadas en los depósitos de Sucamec y destruidas, a fin de que no vuelvan a utilizarse. Entre el 2013 y el 2019 se logró realizar la destrucción de un total 31.128 armas a nivel nacional.
Poca fiscalización
A pesar de estas cifras, para Pedraza aún falta más trabajo de inteligencia por parte de la Policía. “Hay un combate relativo”, indicó. Agregó que si bien se tiene conocimiento de la ubicación aproximada de los lugares donde existe venta ilegal, no hay operativos constantes.
Cabe mencionar que, desde febrero, Lima y Callao permanecen en estado de emergencia a fin de reducir los altos índices de criminalidad. Durante ese tiempo se debe combatir el mercado negro de armas. Sin embargo, los expertos señalan que los trabajos son débiles.
Pedraza explicó que esto podría deberse a la inestabilidad que hay por los cambios constantes en el sector. “Los cambios de ministros no permiten ello. Por el contrario, se sigue fortaleciendo el mercado negro”.
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Indicó que el control por parte de Sucamec debería ser estricto y fortalecido con el trabajo de la Policía Nacional, a fin de erradicar los puntos de ventas, así como también recuperar el armamento ilegal.
La palabra
Wilfredo Pedraza, exministro del Interior
“Hay un combate relativo por los cambios de ministros. Se sabe cuáles son los lugares donde hay venta ilegal de armas de fuego y que con un trabajo de inteligencia más intenso se atacaría con fuerza”.
La clave
En agosto del 2018 se emitió la resolución n° 826-2018, en la que se dispuso el decomiso de 108.163 armas con licencias canceladas. Aún casi 90.000 siguen en la calle.
