El congresista de Moquegua, Jorge Samuel Coayla Juárez, confirmó que la Comunidad Campesina de Tumilaca, Pocata, Coscore y Tala, no aceptó ayer firmar el acta de acuerdos que se elaboró el último viernes con la finalidad de instalar una futura mesa de diálogo con la minera Southern Perú.
La comunidad, ubicada en el distrito de Torata, acusa a la compañía de usurpar sus terrenos hace más de 50 años. La minera argumenta que cuenta con la concesión legal de los predios donde se ubica el reservorio Viña Blanca. El viernes con la presencia de los voceros de Southern, la comunidad y el ministro de Energía y Minas, Carlos Palacios Pérez, se arribaron seis acuerdos, entre ellos la creación de la mesa.
La condición de Southern para iniciar el diálogo era que los protestantes suspendieran la toma del reservorio que alimenta la mina de Cuajone y su campamento. Los representantes de la comunidad señalaron que solo podrían detener la toma con el consentimiento de sus compañeros en una asamblea que se realizaría ayer sábado.
Además, la empresa pedía el desbloqueo de la vía férrea de su mina, otra de las medidas de lucha.
El congresista Coayla detalló que se comunicó con el comunero Iván Mendoza, quien le advirtió que no se firmaría el acta.
“No sé cuál de los seis puntos del acta que se formuló el viernes es con el cual no están de acuerdo, pero el hecho es que no firmaron el acta ayer. Ello quiere decir que la instalación de la mesa de diálogo queda suspendida lamentablemente o al menos es incierta la fecha en que podría concretarse”, declaró el parlamentario.
Para Coayla, la dirección del diálogo entre la minera y la comunidad no fue el mejor el viernes en Torata. Criticó al ministro de Energía y Minas, Carlos Palacios, ya que era mediador, pero no tenía conocimiento del tema. Dijo que no supo orientar el diálogo hacia acuerdos concretos.
“El ministro tenía que dejar la mesa instalada. Esa era la finalidad del viernes, que se instale una mesa para poder discutir los reclamos, pero no se logró”, concluyó el congresista.
En el diálogo del viernes, los voceros de la comunidad aceptaron en un primer momento dejar la toma del reservorio de Viña Blanca, pero bajo la condición que no abandonarían el área. Ante ello, los funcionarios de la minera contestaron que no había motivo para que permanezcan allí, ya que, la administración del reservorio le pertenece a Southern. Los protestantes insistieron que los predios son suyos, y no se logró un acuerdo.