Tras la suspensión de operaciones de la minera MMG Las Bambas, varios trabajadores abandonaron la mina ubicada en la región de Apurímac. A Cusco arribaron al menos cien personas en siete buses de la empresa Palomino.
Las unidades llegaron pasado el mediodía directo al aeropuerto Alejandro Velasco Astete de la Ciudad Imperial; sin embargo, los trabajadores evitaron declarar. Solo dijeron que esperan que el conflicto sea superado para que puedan retornar a sus centros de trabajo. Todos ellos abordaron aviones para Lima.
En comunicación con La República, el dirigente de los trabajadores, Juan Carlos Huamán, refirió que durante el traslado de los pasajeros las unidades no tuvieron inconvenientes en el trayecto debido a que las comunidades de Chumbivilcas, quienes tienen bloqueada la vía, permitieron el paso de los vehículos, tal como se habían comprometido el último viernes.
En tanto, si bien el dirigente dijo desconocer la cantidad de los trabajadores que salieron ayer de Las Bambas, no descarta que otros tomaron rutas distintas. Por ejemplo, refirió que algunos debieron irse hacia Abancay o a Espinar, los procedentes de regiones como Arequipa.
Huamán explicó que en total laboraban más de 8.000 trabajadores en la mina, un promedio de 2.500 de la propia MMG Las Bambas y el resto eran de las empresas contratistas.
Señaló que una mínima cantidad de trabajadores indispensables probablemente permanezcan para el mantenimiento de las maquinarias o el resguardo de las mismas.
En tanto, la empresa MMG Las Bambas no ha emitido ningún comunicado sobre el traslado de trabajadores.