Irwing Espinoza Ávila (33), capitán de la Fuerza Aérea del Perú, partió desde Lima rumbo hacia Chanchamayo junto con sus otros cuatro colegas con la misión de brindar apoyo al Programa de PIAS Aéreas del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis). Horas más tarde, el helicóptero donde viajaba se cayó en Huarochirí y todos los presentes murieron.
En su vivienda de Huanchaco, sus familiares lamentan su muerte y velan la ropa del oficial de la FAP. Hace poco, Espinoza logró su ascenso como mayor y había compartido su logro con sus familiares. Tan solo faltaba la ceremonia oficial, pero esta nunca llegó.
Orlando Ávila, tío del fallecido, describió que el joven era una persona tranquila y dedicada a su labor como parte de la FAP. Sus apodos eran ‘Iwi’, ‘Colorado’ o ‘Gringasho’ por su tez blanca. Aún no tenía hijos, pero sí a su madre y a sus dos hermanos mayores.
“Era un muchacho tranquilo, sano, siempre dedicado a su carrera. Siempre ha querido estar en la Fuerza Aérea. Recientemente fue ascendido a mayor, pero todavía no le daban el distintivo, pero ya él había aprobado todos los exámenes y había ascendido a mayor. Era el orgullo de su madre, mi prima”, dijo en RPP Noticias.
Su familia viajó a Lima tras enterarse de la repentina muerte del capitán. “Su mamá, sus hermanos están en Lima esperando que el cuerpo sea recuperado. Ellos están a la espera, eso es lo que les ha comunicado la Fuerza Aérea y luego les van a hacer los honores en Lima y, posteriormente, va a ser trasladado para el velatorio acá en Huanchaco”, agregó.
La aeronave partió del aeropuerto Jorge Chávez alrededor de las 11 y 52 de la mañana del martes 7 con destino a Pucallpa. Foto: composición LR
Los parientes mencionaron que los restos del capitán llegarían el viernes 10 de diciembre a Trujillo para darle la última despedida. Primero, será velado en la casa de sus padres y luego, será llevado al colegio militar Ramón Castilla. Finalmente, será enterrado en el cementerio El Remanso.