Gianella Aguirre / URPI-LR
El jueves 2 de junio, la embarcación Marisa salió del puerto de Pisco con 10 pescadores a bordo para lo que sería una nueva jornada de trabajo; sin embargo, tres días después reportaron una avería en el motor. El pedido de los hombres a la bahía era por gasolina y víveres. Con el objetivo de no perder la pesca y a pesar del mal tiempo, indicaron que al tener los implementos descargarían en el puerto de Chala. Al día siguiente, Marisa dejó el último reporte satelital a 56 millas de San Juan de Marcona y desde ese momento, los familiares no tienen información de sus paraderos.
“El mensaje por todos es que nuestro creador permita se encuentren con vida, queremos estar más calmados con esta angustia que estamos viviendo”, expresó Angel Changana Ramírez, hermano de uno de los pescadores.
El 7 de Junio, Changana Ramírez se comunicó con la bahía del puerto. El señor conocido como ‘Cléver’ le indicó que no se había alertado a la Capitanía del puerto de Pisco sobre la desaparición, a pesar de que Marisa ya no presentaba contacto o rastro alguno. Los familiares pidieron el apoyo de la empresa para iniciar los trabajos de búsqueda, pero solo recibieron silencio e indiferencia.
De los 10 hombres perdidos en altamar, ocho han sido identificados como:
Es así que el 11 de junio, ante el pedido de los familiares, la Marina de Guerra del Perú envío una avioneta a sobrevolar por cinco horas la zona. El sobrevuelo resultó sin éxito, dado que no se hallaron rastros de los tripulantes de Marisa. Las familias piden el apoyo de la empresa y de la Marina para no parar la búsqueda, puesto que se necesita sobrevolar por más días hasta encontrar a los pescadores.
Cabe indicar que, el 4 de junio, la Capitanía del Puerto de Pisco activó otro plan de búsqueda para 11 pescadores más perdidos durante su jornada desde el 31 de mayo, sumándose hasta el momento 21 hombres perdidos en altamar.