El ministro de Salud, Óscar Ugarte, descartó que, por ahora, las empresas privadas puedan comprar vacunas contra la COVID-19, ya que, por el momento, el Estado peruano es el único que está en negociaciones con las farmacéuticas fabricantes.
Ugarte indicó que en todos los países se repite la misma situación debido a que se busca priorizar el acceso a la vacunas a las personas en situación de vulnerabilidad, como trabajadores de salud y adultos mayores.
“Los privados no van a poder acceder a compras libres mientras no se cierren negociaciones con el Estado. No es una política que el Gobierno quiera excluir a los privados, la realidad en la negociación de compra-venta a nivel internacional es así”, dijo en declaraciones a Canal N.
El ministro manifestó que incluso cuando las empresas puedan adquirir vacunas deberán cumplir ciertas condiciones. Explicó que si bien una ley se los permite, no pueden contravenir el artículo 234 del Código Penal, que señala que cuando se trata de bienes esenciales, las empresas no pueden cobrar más que el Estado y en este caso, las vacunas son gratuitas.
“La autorización está planteada, pero la aplicación para este proceso tiene que tener determinadas pautas. La primera de ellas es que sea gratuita para todos (...). La otra condición es que no se puede alterar el proceso de priorización (...) es lógico que pongamos primero a quienes lo merecen más, como es el caso de los trabajadores de salud, lo que no se puede permitir es que alguien que no pertenece a esa categoría resulte vacunado porque hubo una facilidad que otros no tienen”, sostuvo.
Por último, Ugarte indicó que otro factor que impide a los privados importar vacunas es que solo están autorizados a comprar medicamentos con registro de Digemid, y, a la fecha, las únicas dosis contra la COVID-19 autorizadas por dicha institución son las elaboradas por Sinopharm y Pfizer.