Un grupo de pobladores de la provincia de Tarata, protestaron ayer por la llegada del gobernador regional, Juan Tonconi Quispe, al pueblo. La Policía tuvo que proteger a la autoridad, porque incluso los agricultores le lanzaron fruta a Tonconi cuando los saludaba.
El motivo de la protesta fue el proyecto hídrico Vilavilani. Este consiste en el trasvase desde fuentes de agua de Tarata hacia la ciudad de Tacna. Los manifestantes consideraron una provocación la visita de Tonconi, quien tuvo que ponerse a buen resguardo en el local de la Unidad de Gestión Educativa Local (Ugel Tarata).
Tarata no está de acuerdo con Vilavilani, y más allá de argumentos técnicos, la protesta se debe al abandono y la poca inversión gubernamental en esa provincia. Tienen población en extrema pobreza, carecen de servicios de alcantarillado, agua potable y represas que garanticen agua en épocas de sequía.
El gobernador también ha sido criticado por su participación el pasado sábado en el aniversario del centro poblado de Pampa Sitana. Fue captado bailando junto a otras autoridades. El alcalde de Sitana, Víctor Gutierrez, sostuvo que la danza típica de la Tarkada duró algunos minutos y fue parte de un acto artístico en la ceremonia.
Por su parte la vicegorbernadora, Magda Portugal Copaja, criticó a Tonconi y sostuvo que es el primero quien debe respetar el distanciamiento social.