El retraso en la entrega de equipos médicos indispensables para el tratamiento de pacientes COVID -19 en la Unidad de Cuidados Intensivos, habría puesto en serio peligro la salud de los enfermos del Hospital de Apoyo II-2 de Sullana, advirtió la Contraloría General de la República.
De acuerdo con el Informe de Hito de Control N° 5853-2020-CG/GRPI-SCC, el órgano de control identificó retrasos en la compra y entrega de equipos médicos, valorizados en un millón de soles, para la atención de urgencias en pacientes con COVID-19 en UCI.
Las órdenes de compra revelaron que el área de Emergencia y UCI solicitó la adquisición de monitores de funciones vitales de seis parámetros (adulto-pediátrico) el 08 de abril de 2020; sin embargo, recién 18 días después se emitió la orden de compra de 17 equipos por un monto total de S/ 952,007.48
La comisión comprobó que desde el 16 de abril el proveedor había enviado una cotización con una validez de tres días calendario y ofertaba la entrega total de los equipos para fines de mayo. Esta demora originó la respuesta de la empresa que aseguró contar con solo 12 monitores, pero se comprometía a completar la entrega en junio.
Posteriormente, a pocos días de vencerse el plazo, el proveedor pidió una ampliación de 15 días, debido a un problema con la importación, y dicha solicitud fue aceptada.
La Contraloría indicó que si bien la Ley de Contrataciones y Adquisiciones del Estado contempla estas ampliaciones, el proveedor que contrató con el Hospital de Sullana no habría justificado debidamente este recurso.