Todos están distendidos pero saben que la tranquilidad puede romperse en cualquier momento. Cuando suena la alarma deben ponerse sus uniformes y salir a cumplir su tarea: Salvar vidas.
En lo que va del estado de emergencia por la COVID-19, el Cuerpo General de Bomberos Voluntarios del Perú atendió más de 2.500 incendios.
En marzo extinguieron 1.144 siniestros, mientras que en abril, con la cuarentena en marcha, fueron 641 y en mayo la cifra descendió a 565 incidentes a nivel nacional. En estas dos primeras semanas de junio, solo en Lima y callao ya se han sofocado 205 incendios.
Brigadistas del CGBVP aseguraron que es importante reducir la sobrecarga de las instalaciones eléctricas en casa, desconectando aquellos equipos que no sean necesarios y dosificando su uso durante el día.
Recomendaron también estar atento a las hornillas encendidas en la cocina, y saber que si se inflama la sartén hay que mantener la calma y sofocar las llamas cubriéndolas con la tapa de una olla.
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Asimismo. Es importante verificar cómo están las mangueras y conexiones del gas. Si se percibe un olor extraño puede haber fuga, ante lo cual debe cerrarse la llave general, abrir puertas y ventanas para ventilar y llamar a los bomberos al 116.
Los bomberos advirtieron que no se debe acumular material inflamable, como papeles y cartones, restos de pintura y otros derivados del petróleo, o sillones viejos, pues en contacto con el calor pueden prenderse.
Otro riesgo latente de incendio está en las velas y los lamparines a kerosene, que todavía se usan en algunos sectores populares; deben alejarse de cortinas, muebles o papeles.
En el caso de las velas, antes de encenderse hay que colocarlas bien fijas en el centro de un plato, con un poco de agua para que si se caen la llama se apague de inmediato.
Evita quemar la basura, los arbustos cortados del jardín o maleza de campo. Las cenizas prendidas pueden caer en el techo del vecino o entrar a tu propia vivienda y empezar un siniestro sin que te des cuenta.
Además, el hum o daña el medio ambiente y puede causar intoxicación en las personas, especialmente en adultos mayores, niños o en quien sufra de enfermedades respiratorias.
Y nunca deje a los niños encerrados solos en casa ni los encargue a una persona con alguna discapacidad. Pida ayuda y organícese con sus vecinos para evitar y saber que hacer en caso de una emergencia.
Mantener la calma, avisar a todos en casa con voz fuerte y firme, salir rápidamente del lugar afectado (ayudando a los niños y ancianos a evacuar), pedir ayuda a los vecinos y a los bomberos voluntarios al 116. Buscar refugio en un sitio seguro.