El alcalde de Trujillo, Daniel Marcelo, se reunió ayer con dirigentes y comerciantes de La Hermelinda para ver avances, compromisos y evaluar conjuntamente lo hecho a fin de reordenarse y poder reabrir el mercado cuando culmine el plazo de cierre de 15 días, que vence este 28 de mayo. Los ambientes fueron cerrados debido a que se habían convertido en foco de coronavirus.
Uno de los puntos que se tocó fue el de las entradas. En el caso de La Hermelinda, por ejemplo, los ingresos y salidas deben estar enrejados y allí tienen 42 puertas. Es un mercado grande y no se pue controlar quienes entran o salen. Eso, definitivamente, tendrá que cambiar.
“Estamos analizando con Defensa Civil, porque tampoco quisiéramos que el ingreso sea reducido y se generen aglomeraciones. Seguramente habrá algunos más. Ellos tendrán que hacer un compromiso de control al respecto. Los accesos se tienen que enrejar y los comerciantes han adelantado que están de acuerdo”, dijo.
Marcelo calificó la reunión de positiva. En realidad, se trató de dos citas de trabajo, la primera con el rubro de papas y la segunda con abarrotes.
La autoridad reconoció que no fue fácil entrar al mercado y que hubo amenazas a trabajadores y funcionarios, que debieron ser valientes para resistir a mafias y delincuentes, señaló, reconociendo lo hecho con apoyo de regidores.