Luis Álvarez Guevara
El Comité de Gestión del Convenio Marco Espinar-Cusco dará un bono económico de mil soles a los ciudadanos mayores de 18 años incluidos en el padrón electoral. Los bonos saldrán del aporte voluntario que realiza anualmente la empresa minera Glencore - que explota cobre en el asiento de Antapaccay. La compañía entrega este dinero como un aporte voluntario en compensación a sus operaciones.
El acuerdo maduró luego de más de tres horas de debate. Votaron a favor de la medida cinco de los ocho integrantes del comité de gestión que administra estos recursos destinados a obras de desarrollo. Son 40 mil 108 los beneficiados, de acuerdo al padrón electoral. Se desembolsará de 40 a 50 millones de soles. No todos están de acuerdo con el reparto. Hubo oposición de los representantes de la empresa y líderes gremiales de la Federación Unificada de Campesinos de Espinar y de la Cuenca de Cañipía. Estos se abstuvieron de votar.
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Livio Paliza, gerente de Relaciones Comunitarias de Glencore-Antapacay, consideró que un acuerdo tan importante debe aprobarse por unanimidad y que lo acordado no cumple el procedimiento regular del Convenio Marco Espinar-Cusco; ese dinero se utiliza en obras y proyectos de desarrollo.
“Han decidido repartirse el dinero. Con esta decisión están pulverizando ese presupuesto”, cuestionó, antes de retirase de la reunión.
El representante de la cuenca Cañipía, Víctor Álvarez, sostuvo que antes de la cita hubo un consenso con sus seis comunidades. Estas optaron por abstenerse de la propuesta. “Tenemos proyectos multicomunales y otros por iniciar. Hemos presentado un nuevo perfil bajo una aprobación comunal y estamos trabajando en eso”, argumentó.
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Similares posiciones tuvieron los delegados de la Federación Unificada de Campesinos.
A su turno, el presidente del Frente Único de Defensa de los Intereses de la provincia de Espinar y gestor de la propuesta del bono humanitario, Ricardo Carlos, refirió que la medida favorecerá a todo Espinar. Añadió que la empresa minera cuenta con 140 millones de soles del Convenio Marco. Por eso le pedirán un informe para ver los saldos de los proyectos ejecutados del último aporte y así no afectar los trabajos pendientes o en evaluación y luego pedir reembolso del año.
El Convenio Marco fue instaurado en el 2003, entre la provincia de Espinar y la entonces empresa Tintaya, después de varias protestas sociales. Se trata de un fondo constituido por el aporte voluntario de la empresa minera, hoy asumida por Glencore, que equivale al 3% de sus utilidades anuales. El monto varía cada año, porque depende de la producción del cobre y el precio de este.
Es el Comité de Gestión del Convenio Marco Espinar-Cusco, integrado por bases sociales como comunidades campesinas, municipalidades distritales y gremios, quienes tienen la potestad de decidir el destino del dinero, que no proviene del canon y regalías de parte de la empresa.