En los próximos tres meses, estaría disponible en el país un nuevo tipo de mascarilla reutilizable, sencillo de producir y que se asemeja al modelo N95, el cual previene contagios del COVID-19. El artífice de esta iniciativa es el ingeniero arequipeño Erick Febres Gamero.
El ingeniero de la Universidad Nacional de San Agustín y su equipo lograron que su proyecto sea seleccionado por Concytec en el concurso Proyectos Especiales: Respuesta al COVID-19. Es así que se hicieron acreedores a un financiamiento de 200 mil soles para asegurar el éxito de su idea.
El arequipeño contó a Agencia Andina que las mascarillas que diseñó pueden proporcionar un aislamiento eficaz de la zona de la nariz y la boca, a través de las cuales una persona podría contagiarse del nuevo coronavirus.
Lo innovador de este nuevo barbijo, que en su primera etapa se hizo a base de poliéster, es que contiene un hilo recubierto con caucho que puede asegurar al portador, mayor seguridad frente al contagio. Además, el material permite que la mascarilla pueda ser lavada -cumpliendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias- y reutilizada.
Adicional a ello, el equipo detrás de este proyecto ha propuesto que la tela se pueda impregnar con una sustancia antibacterial y antiviral, para permitir un mayor nivel de protección.