Un ciudadano de nacionalidad venezolana, identificado como José Antonio Torres Navarro, murió este último jueves 19 de noviembre, luego de ser aplastado por un ascensor mientras trabajaba en una empresa textil, la cual está ubicada en la cuadra 1 de la avenida Canto Bello, en San Juan de Lurigancho.
Hasta el lugar llegó su pareja, que tiene siete meses de gestación, y primo para solicitar mayor información sobre el accidente ocurrido. ‘‘Solamente salen y entran, cierran la puerta, no nos dejan ver, no sabemos nada’’, expresó la mujer a RPP.
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‘‘Que alguien nos dé la cara, que nos diga cómo sucedió (...). No es un animal, es una persona. ¿Por qué no nos dan respuesta?’’, agregó. Asimismo, el primo de la víctima, quien tenía 34 años,
Asimismo, el primo del hombre, quien tenía 34 años de edad, indicó que hasta el momento solo le han dicho que su tío falleció mientras trabajaba. ‘‘Estaba metiendo mercadería a uno de los ascensores, el ascensor se desplomó (...). Desconozco los pormenores, ya la Policía se encargará de decirnos cuál es su verdad’’, dijo.
El familiar comentó que, debido al alto costo de la repatriación del cuerpo, el hombre será cremado en Perú, él ya cuenta con la autorización de los padres. ‘‘La empresa tiene que tomar una responsabilidad 100% de los hechos’’, aseveró.
Amigos de José Antonio indicaron que trabajaba 12 horas diarias trasladando telas recortadas desde el primer piso hasta el cuatro, en donde se ubica el taller. Él era remunerado con 220 soles semanas, un total de 880 mensuales.
En el accidente un ciudadano peruano también resultó gravemente herido. Él fue trasladado hasta el Hospital San Juan de Lurigancho.