Por: Carlos Contreras Chipana
Otra institución que deberá cerrar en los próximos dos años. La Escuela Internacional de Posgrado (ESIP), cuyo dueño también es el excongresista solidario José Luna Gálvez, obtuvo el licenciamiento denegado por parte de la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu).
A través de la resolución del consejo directivo de la Sunedu, publicada hoy en el diario El Peruano, se precisa que la ESIP no cumplió con ninguna de las condiciones básicas de calidad.
La ESIP recibió en el 2010 la autorización del exConsejo Nacional para la Autorización y Funcionamiento de Universidades (Conafu). Sin embargo, durante el proceso de licenciamiento, aclaró que solo realizó procesos de admisión de manera intermitente. Por ejemplo, en el 2018, la escuela ubicada en una casona del Centro de Lima no admitió alumnos, aunque sí prosiguió con sus actividades.
Actualmente, la escuela atiende a 57 estudiantes y registra 32 egresados y 21 graduados. Además, hoy ofrece dos maestrías de las cinco que tiene autorizadas (Evaluación y Acreditación de la Calidad Educativa, así como Gerencia de Proyectos y Programas Sociales).
Hasta ayer, la ESIP ofrecía también cursos 100% virtuales en Gestión Municipal, Gestión Pública y Dirección y Gestión de Proyectos, con una duración de dos meses y por 250 soles.
Según la Sunedu, la escuela del también dueño de la Universidad Telesup, no tiene objetivos institucionales y estratégicos alcanzables ni medibles. tampoco cuenta con un plan de mantenimiento vigente, ni incluye en su normativa disposiciones sobre los rubros a los que destina el financiamiento de los proyectos de investigación.
Asimismo, señala que la ESIP no define los criterios objetivos a tomar en cuenta durante el proceso de selección de docentes contratados por invitación. Su normativa no determina los mecanismos para la evaluación de desempeño de los docentes; y la planificación para la capacitación y actualización docente, no tiene un presupuesto asignado.
“Con respecto al seguimiento al egresado, la recopilación de información no permite la actualización del diseño curricular en concordancia con las necesidades y la demanda laboral”, explica la Sunedu.
De esta manera, con la ESIP, ya hay dos escuelas de posgrado y 25 universidades con licenciamiento denegado. Estas deben cerrar en los próximos dos años.