Realidad. Padres de Rodrigo y Nicolás cuentan que en Arequipa no existen centros especializados y solo hay 700 docentes para atender niños con TEA. En Chiclayo hay pocos especialistas.,Historias: lo difícil que es vivir con autismo lejos de Lima,Roberto Orihuela - Carlos Vásquez Rosa Vásquez no había escuchado sobre el Trastorno del Espectro Autista (TEA) hasta que un neuropediatra le dijo que su hijo Rodrigo, que en aquel momento tenía un año, vivía con esa condición. Cuatro años después, Rosa dirige la ONG Autismo Aqp, y desde allí cuenta lo que tuvo que superar para ofrecerle a su niño la educación y tratamientos que necesita, pese a que Arequipa no cuenta con centros especializados en autismo. PUEDES VER Tragedia en colegio Trilce: escolar que disparó por accidente a compañero salió en libertad [VIDEO] Rodrigo ama moldear figuras en plastilina. Las acomoda una detrás de otra formando una especie de vagones de tren. En el colegio hace lo mismo: juega mientras disfruta del silencio. "Trabajamos mucho con él y con sus maestros para que comprendan su condición. Ahora lee sin que le obliguemos y estamos iniciando varias terapias para mejorar su comunicación y conducta”, dice Rosa. En su ONG reúne a 120 padres que buscan mejorar el entendimiento de esta condición en la región Arequipa. PUEDES VER Decomisan serpientes y madera de procedencia ilegal en Cajamarca Muchos de ellos no pueden inscribir a sus hijos para que sigan una educación regular, y en la mayoría de casos son los mismos profesores quienes no los aceptan. Esto fue confirmado por la especialista en Educación Especial de la gerencia regional de Educación, Irasema Bustinza. En la región hay poco más de 700 maestros capacitados para enseñar y guiar a niños con necesidades especiales, pero muy pocos que conocen a fondo el TEA. “Algunos docentes utilizan la burla como un método nada efectivo para intentar corregir la conducta de los niños con autismo. Pero solo empeoran la situación, agudizando el bullying”, explica Leonel Revilla, especialista en Psicología Excepcional. PUEDES VER S.J.L.: Dos sujetos fueron detenidos luego de asaltar y golpear a una mujer embarazada En Chiclayo Nicolás tiene 18 años, declama poemas, toca el piano, ordena sus cosas por tamaño, es campeón en natación y es autista. Cada vez que ve una piscina, es capaz de ingresar y, a veces, termina dando más de 60 vueltas, como cuando ganó el primer puesto en las olimpiadas especiales del 2018. “Nunca pensé viajar a muchas ciudades con mi hijo y participar en varios campeonatos. Él era un niño muy inquieto y la natación le ayudó a controlar su hiperactividad", cuenta Roxana Vásquez, su madre, mientras enseña con orgullo las más de 17 medallas ganadas por Nicolás. Cuando Roxana se enteró de que su hijo era autista, se dedicó por completo a él y a buscar terapistas en la región Lambayeque, donde la falta de información y los prejuicios son obstáculos que deben enfrentar, mientras se busca una terapia. "Sus respuestas serán una cajita de sorpresas", recuerda que le dijeron a Roxana y hoy, con mucho orgullo, sabe que su hijo es digno de admirar. PUEDES VER San Martín: Inauguran planta portátil de agua para pobladores de Bellavista y Morales “Centros de salud públicos no cuentan con profesionales" Fernando Hoyos, presidente de la Asociación Autismo Chiclayo, asegura que los centros de salud públicos no cuentan con suficientes profesionales, lo que obliga a los menores a atenderse en centros privados, que generan un gasto de entre S/ 1.500 y S/ 3.000 solo en terapias. Fernando, padre de un niño autista, considera que los centros de salud del Minsa deben capacitar a su personal en terapias de lenguaje y conducta. Junto a otros padres de familia, Fernando se ha comprometido a coordinar con la Policía Nacional la ejecución de medidas para la búsqueda de menores como la 'Ley Brunito' (Ley Nº 29685) y la Alerta Amber, ante las constantes desapariciones de niños con autismo.