Numerosas veces nos han dicho que debemos cuidar nuestro cuerpo de todo problema de salud y la razón principal es porque es una maravilla. Hay curiosidades respecto a nuestros sistemas, ya sea el nervioso, digestivo o inmunitario, que nos facilitan la vida. Uno de ellos es que estamos en constante regeneración, reemplazando células viejas por nuevas, haciendo que la edad promedio de estas, en el cuerpo de un adulto, sea bastante corta.
En medio de ello, hay un órgano del cuerpo humano que es capaz de regenerarse con solamente su tercera parte. Nos referimos al hígado, el más grande de todo el cuerpo humano y que funciona para digerir los alimentos, almacenar energía y eliminar las toxinas. Aquí te contamos cómo es el proceso de regeneración de este regulador, tan relacionado con el consumo de alcohol.
En primer lugar, debe estar libre de cualquier enfermedad, puesto que la hepatitis o la incidencia del alcoholismo terminan afectándolo y dañando sus funciones, entre ellas, la capacidad de regenerarse.
Son sus células las que se multiplican para regenerar el tejido, en caso de que se elimine alguna parte, a través de algún trasplante. Las células de este tejido, que se llaman hepatocitos, son las primeras en reproducirse, en cuanto detectan que es necesario, induciendo a que las células vecinas, en el mismo sentido, se dividan a través de mitosis, y así lograr esta regeneración.
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A través del consumo de algunos alimentos, podemos no solamente ayudar a una regeneración natural del hígado, sino también a sanarlo luego de una enfermedad o para prevenir que se dañe su buen funcionamiento.