Desde que empezó el brote del nuevo coronavirus en China, a finales del año pasado, varios países en el mundo han comenzado a aplicar la tradicional medida de cuarentena para evitar una mayor propagación. Los expertos en salud pública reconocen que su aplicación puede prevenir un contagio mucho mayor, pero también puede traer consecuencias negativas que afecten la salud mental de la población.
Yuri Cutipé, director de Salud Mental del Ministerio de Salud (Minsa), informó que para evitar problemas psicológicos durante estas dos semanas, es importante entender que la cuarentena no es negativa, sino que es beneficiosa para todos en el sentido de evitar un mayor contagio por el COVID-19.
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“La cuarentena puede percibirse como amenazante, cuando en realidad es una medida protectora. Sin embargo, es posible que las personas lo vean negativamente, sobre todo en los primeros días. Esta percepción puede durar unos días hasta que se termine por comprender la ventaja que tiene el aislamiento en la lucha contra este virus”, señaló a La República.
El especialista indicó que los principales malestares psicológicos se presentan por medio de una tensión emocional, ansiedad, estrés, confusión y hasta un pensamiento constante de la gravedad de la medida.
“Algunas personas van a presentar malestares emocionales como tensión y solo van pensar en la medida y los riesgos. También en el caso de los jóvenes que tienen una actividad más activa pueden sentir ansiedad, estrés, entre otros efectos psicológicos”, sostuvo Cutipé.
También explicó que los más vulnerables serán los menores de edad, quienes están acostumbrados a entretenerse en actividades fuera de casa. Para ello, Cutipé brindó algunas recomendaciones dirigidas a los padres.
“Es importante que los adultos le pregunten a los menores que les preocupa e informales la situación que estamos viviendo para que tomen las medidas adecuadas”, explicó.
El director de Salud Mental del Minsa, Yuri Cuitipé, recomendó a la población mirar esta medida positivamente y aprovechar este tiempo junto a la familia. El diálogo constante entre los integrantes será fundamental para conocer el estado emocional de cada uno y así buscar apoyo de manera conjunta. Lo que no es bueno es aislarse emocionalmente.
“Las recomendaciones para los adultos son tranquilizarnos, informarnos bien para aceptar que es una medida que beneficia a todos, organizar el tiempo en casa, utilizar esta medida como un espacio de reunión familiar, de diálogo, jugar con la familia”, puntualizó.
Para evitar altos índices de ansiedad, también se recomienda dedicar ciertas horas a la revisión de noticias sobre coronavirus y ocupar mayor tiempo en actividades diversas que van desde ver películas con la familia hasta realizar juegos con los más pequeños.