Una nueva encuesta difundida este domingo por el IEP —en exclusiva para La República— reveló la preocupante percepción de la población respecto el Gobierno de la presidenta Dina Boluarte, el cual, a menos de tres meses de iniciado, cuenta con más de medio centenar de muertes en su haber. Los datos precisados se dan en concordancia de alertas de otras instituciones internacionales como The Economist, que anunció hace un mes que el Perú se encontraba en un régimen híbrido que se balancea entre el autoritarismo y la democracia.
Según los datos registrados por el estudio, solo un 55% de peruanos consideran que el Perú se mantiene dentro de una democracia, frente a un total de 41% de peruanos que desconfía de esta afirmación y cree lo contrario. En tanto, existe un grupo del 4% de ciudadanos que prefiere no opinar o que no sabe sobre la situación política actual.
Las respuestas a esta encuesta fueron recogidas desde el 18 al 22 de febrero de este año, un mes después de realizadas las marchas en la capital en las que se denunciaba el presunto uso desproporcionado de la fuerza policial, el mismo que, desde el Ejecutivo, ha sido respaldado en los diferentes mensajes a la nación de Dina Boluarte.
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Congreso tiene rechazo de un 90% y Dina Boluarte obtiene un 77% de desaprobación, según encuesta IEP
El último sondeo, realizado por el Instituto de Estudios Peruanos dio a conocer que mientras el Congreso obtiene un rechazo del 90% en el último mes, la presidenta Dina Boluarte mantiene un 77% de desaprobación.
Respecto al Congreso, el 90% de desaprobación supone el máximo rechazo obtenido por este poder del Estado desde que se instauró el periodo legislativo a cargo de su presidente José Williams. Además, solo un 6% de personas se encuentra a favor de la gestión del Parlamento.
En el caso de la presidenta Dina Boluarte, el 73% de personas encuestadas considera que debería renunciar a su cargo, frente a solo un 25% que sostiene que debería mantenerse en su gestión. La mandataria, por su lado, insiste en permanecer al frente del Ejecutivo. "Mi renuncia no es negociable", ha reiterado la jefa de Estado en diversas ocasiones.