Juan Gamarra Nieto. Sociólogo y docente universitario. Afirma que hoy no está en discusión el modelo económico sino que está en juego el sistema democrático., Wilson Castro Trujillo A una semana de la segunda vuelta electoral, las encuestas le dan una ligera ventaja a la candidata Keiko Fujimori sobre Pedro Pablo Kuczynski. ¿A qué atribuye esa situación? Bueno, hay que ser muy cuidadosos. Hay que recordar que en mayo del 2011, también a dos semanas de la segunda vuelta, se dijo que Ollanta Humala iba a perder y al final ganó. La gran encuesta será el 5 (de junio). Pero es evidente que el fujimorismo tiene la primera opción de volver al poder. Creo que ahora no se trata de discutir el modelo o programa económico sino que está en juego el sistema democrático. Los electores que dicen que van a votar en blanco o viciado no se dan cuenta que de acuerdo a las normas electorales están favoreciendo a Keiko Fujimori. Ahora, el voto de conciencia nos lleva a la siguiente pregunta ¿siempre tenemos que votar por el mal menor? Lamentablemente sí. Con Ollanta Humala sucedió lo mismo. Así es. Con Alan García también sucedió lo mismo, en su segundo período. Si bien es cierto no salimos hasta ahora de ese histórico mal menor, tenemos que apostar hoy por el sistema democrático. Vamos a definir el futuro del país. Hay que repensar el voto y no lavarse las manos y emitir un voto en blanco o viciado. Está claro que el voto a PPK será un voto crítico. Tiene que ser un voto crítico y no un cheque en blanco. ¿Qué pasa si PPK falla como falló Humala? Otra vez tendremos cinco años para sentirnos decepcionados de que no se combatió, por ejemplo, la inseguridad ciudadana. Esperemos que esa historia no se repita. Tenemos que romper con ese destino permanente que tienen los peruanos del mal menor. La ex candidata presidencial del Frente Amplio, Verónika Mendoza, no ha sido clara en cuanto a su posición en el balotaje. Ha dicho que no votará ni en blanco ni viciado. A Verónika le falta claridad en su mensaje. ¿No le parece? Es obvio que no votará por Keiko, pero tampoco ha dicho voten por PPK. En este momento se tiene que zanjar, se tiene que tomar una posición. No podemos tener una actitud fácil o facilista sino una decisión por quién voy a votar. Más aún, en una política como ella que tiene mucho futuro para las siguientes elecciones. Creo que no es la conducta auténtica de un político. Es una lavada de manos tipo Pilatos. Verónica tiene que decir: voten por tal candidato y punto. Porque la coyuntura política actual requiere una decisión y no una posición política tibia... Es un deber del ciudadano en política asumir una posición, aunque no estemos todos de acuerdo. Verónika, incluso, tendrá una bancada importante en el próximo Congreso de la República, una fuerza respetable y un tanto mayor que la de PPK, que podrá fiscalizar un posible gobierno de PPK. ¿Cómo se explica que el fujimorismo conserve un voto duro que supera el 40 por ciento, pese a que la candidata Keiko Fujimori está rodeada de personajes ligados a su padre Alberto Fujimori y Vladimiro Montesinos y de dirigentes como Joaquín Ramírez, denunciado por presunto lavado de activos? Hay un estudio que se presentó hace más de un mes en donde se indica quiénes son los votantes y por estratos es el D y E. ¿Cuál es el estrato D y E? Los que están en un nivel social, económico y cultural muy bajo. Si se analiza la campaña y las frases de Keiko Fujimori, justamente podemos darnos cuenta que ella ha ido a los bolsones de pobreza. A ese sector de la población lamentablemente se le ha enseñado a estirar la mano, a creer en las promesas. Es una población cautiva que viene desde la época de Alberto Fujimori. Recordemos cómo se manejaban los programas sociales en los 90. Malas juntas ¿Keiko es lo mismo que su padre Alberto Fujimori? Keiko está rodeada de gran parte del entorno de su padre, muchos de sus ofrecimientos están ligados a él. ¿Qué dijo Alberto cuando fue capturado en Chile? Si yo no vuelvo a ser presidente, quien va a continuar la dinastía es mi hija Keiko. Todo está encaminado a eso. Tengo que reconocer que Keiko lleva cinco años de trabajo político en todo el Perú. Lo cierto es que el fujimorismo puede retornar al poder y con él una serie de prácticas muy cuestionadas por la sociedad. Veo que la situación es bastante difícil. Keiko Fujimori tiene un entorno que no es casualidad. Su ex secretario general Joaquín Ramírez tiene una serie de denuncias de lavado de activos y es investigado por la DEA. Estamos a punto de caer en un narcoestado.