El periodista César Hildebrandt no fue ajeno al discurso de 28 de julio de la presidenta y destacó la innecesaria extensión del mismo. De igual forma, resaltó la anecdótica presencia del hermano de la jefa de Estado, Nicanor Boluarte, y el canciller Javier González-Olaechea, quienes se durmieron en medio del mensaje de la presidenta Dina Boluarte.
"La señora que frecuenta Palacio de Gobierno fue a la sede de quien tiene el poder, es decir, el Congreso y habló cinco horas. Quiso impresionarnos pero lo único que logró fue aburrirnos. Su discurso hizo dormir a su hermano Nicanor y al que hoy funge de ministro de Relaciones Exteriores. Los dos roncaron a su gusto. Otros, los que pudieron, huyeron", indicó Hildebrandt durante la emisión de su último podcast.
Asimismo, el periodista criticó la estructura y fondo del mensaje a la nación. "Fueron 79 páginas de mensaje. Alguien le dijo a la presidenta que si nos atormentaba con su voz y la prosa de sus secretarios, demostraría productividad, liderazgo, dominio de la escena político. Alguien debió haberle dicho, señora dicen que usted no gobierna, demuestre que no es así. Fueron cinco horas de demagogia pura y dura. Además, fue otra huida a rendir cuentas", expresó.
Empezando por los congresistas, muchos de estos cuestionaron la necesidad de tanto tiempo para emitir mensajes confusos y con cifras engañosas. "Son cinco horas perdidas en todo el país. Cinco horas de escuchar cosas que no plantean absolutamente nada. Bastaba una página con una sola línea diciendo que renunciaba", dijo el parlamentario Jaime Quito a La República.
En tanto, el legislador Pasión Dávila rechazó la presencia del hermano de la presidenta, Nicanor Boluarte, en el hemiciclo. "Es lamentable. Debería tener algo de vergüenza. Todavía ella con muchas ganas de querer provocar a la gente. Eso no lo compartimos", expresó a este medio.
Dina Boluarte brindó el mensaje presidencial del 28 de julio frente a un hemiciclo vació. Foto: La República
Por su parte, la congresista Flor Pablo expresó su rechazo retirándose del hemiciclo durante el discurso presidencial. Ella fue la primera de muchos parlamentarios que decidieron irse. "No me da la conciencia para quedarme en el Pleno escuchando a la Presidenta, viendo tanta hipocresía y escuchando tantas mentiras. Canté nuestro himno nacional y me retiré", expresó la parlamentaria en sus redes sociales.
Roberto Sánchez Palomino, de la bancada de Cambio Democrático – Juntos por el Perú, también se retiró del hemiciclo, apenas la presidenta Dina Boluarte iniciaba su mensaje a la nación. El congresista pasó frente al gabinete ministerial dirigiéndose hacia la salida del Legislativo. "Me retiro de su mensaje presidencial lleno de mentiras y burlas al sentido común (...) ¡Justicia a los asesinados hermanos nuestros del Sur!", publicó a través de su cuenta de X, antes Twitter.
En la misma línea, expertos en la coyuntura política se pronunciaron al respecto. "Esto ha sido, y se los digo con toda sinceridad, una falta de respeto al Perú. Cinco horas de mensaje es ridículo, sino absurdo. La idea de un mensaje es que te escuchen. La idea de dar cuenta al país de lo que has hecho implica tener una estrategia para ser escuchado. Cinco horas es una falta de respeto absoluta. Sabían perfectamente, los que planificaron esto, que terminaría pasadas las 4 de la tarde. Lo que denota es que no quiere que la escuchen o que quiere dar la impresión de una mujer trabajadora", resaltó la abogada Rosa María Palacios.