Tras culminar la primera audiencia del juicio contra Keiko Fujimori y la cúpula de Fuerza Popular por el Caso Cócteles, el fiscal José Domingo Pérez sustentó la primera parte de la acusación contra los más de 40 imputados en el proceso.
En una extensa sesión, el fiscal aseguró contar con diversos testimonios que prueban que Keiko Fujimori fue la líder de una organización criminal constituida para disfrazar los millonarios aportes recibidos para sus campañas presidenciales de 2011 y 2016.
Además, busca instrumentalizar las instituciones del Estado para lograr impunidad en las graves acusaciones que pesan en su contra. Por estos delitos (organización criminal, lavado de activos y obstrucción a la justicia), la fiscalía pide para Keiko Fujimori 30 años y 10 meses de pena privativa de la libertad.
Solo al inicio de su exposición, Domingo Pérez se refirió a Fuerza Popular como una organización criminal que seguía el legado del expresidente Alberto Fujimori.
"Fuerza Popular es una organización heredera del legado criminal de Alberto Fujimori, quien está condenado por el delito de lesa humanidad por la justicia peruana", aseveró el fiscal.
Asimismo, Domingo Pérez explicó la manera en la que Keiko Fujimori utilizó el proceso electoral para reunir dinero ilegal, obtener poder y obstruir a la justicia.
El fiscal mencionó a varios excongresistas y políticos de Fuerza Popular, antes Fuerza 2011, que acudirán a las audiencias y brindarán su testimonio sobre los negocios al interior del partido. Entre esos nombres están el excongresista Renzo Reggiardo, Patricia Donayre, Rolando Reátegui, entre otros.
"Ustedes van a escuchar, señores jueces, cómo las elecciones generales son el vehículo que utilizan para captar dinero, para obtener poder, para obstruir la justicia que ustedes representan", remarcó.
En otro momento, Domingo Pérez indicó que los congresistas fujimoristas aprobaron una ley para exculpar a Odebrecht de toda responsabilidad en la investigación en el 2018. Además, recordó que los sobornos de la constructora se pagaron desde que Keiko Fujimori era congresista.
José Domingo Pérez explicó que la recolección del dinero, o la 'captación de activos', logró reunir alrededor de 10 millones de dólares de diversas empresas.
Dos de los captadores mencionados en esta primera parte por el fiscal fueron Jaime Yoshiyama Tanaka y Augusto Bedoya, quienes, por encargo de Keiko Fujimori, se reunían con empresarios que posteriormente entregaban fuertes sumas de dinero.
Domingo Pérez aseguró que contarán con el testimonio de Jorge Barata, exdirectivo de Odebrecht que entregó a Fujimori alrededor de 1 millón de dólares en dos partes.
Si bien es cierto que a la salida de la sala, Keiko Fujimori acusó al fiscal de hacer política y aseguró que no tiene las pruebas suficientes para sustentar su acusación.