En el sexto día del paro de transportistas y tras las disculpas del presidente de la República, Pedro Castillo, ante sus declaraciones sobre unos supuestos pagos a dirigentes para continuar con las manifestaciones, el Gobierno no ha logrado poner punto final al conflicto. Este sábado, una delegación enviada por el Ejecutivo viajó a la ciudad de Jauja, en Junín, para iniciar el diálogo. No obstante, debido al tiempo pasado, parece una medida tardía.
Para el analista político y director de Vox Populi, Luis Benavente, uno de los motivos por los que Pedro Castillo no ha sabido manejar la situación, y se ha desbordado hasta llegar al punto en el que nos encontramos, es la falta de visión.
“Creo que le falta a Castillo una visión política más lúcida. No llega a entender la política nacional, solo sindical y gremial, que tiene otra estructura. No tiene operadores políticos que puedan hacer eso. Tiene una línea ideológica y todo pasa por ese embudo. No podría haber visto lo que venía y no ha tenido reflejos. Eso se nota en su mensaje. Se ha rectificado, pero ya dijo lo que dijo. Es una acusación muy fuerte la que mencionó de que habían recibido dinero algunos dirigentes”, dijo en conversación con La República.
Además, consideró que existe ahora un sector de la población, fuera de la clase media, que le está mostrando su rechazo, y el jefe de Estado ha estado más preocupado por ver el proceso de vacancia que tuvo en su contra.
“Pero no solo es eso. También se ha encontrado con un rechazo no solo está focalizado en la clase media, sino que hay muchas personas que creyeron en un principio en Castillo y ahora se han sentido defraudadas. Lo que Castillo tuvo que haber hecho es mandar operadores y tratar de llegar a un acuerdo, negociar, pero no creo que haya sido así y el tema lo desbordó. Su atención ha estado más en la defensa del proceso de vacancia”, argumentó.
Por otro lado, con respecto al pedido de los transportistas de que el presidente viaje hasta la ciudad de Huancayo para entablar el diálogo, Benavente se mostró en desacuerdo, ya que consideró que se trataría de una situación muy peligrosa.
“Es peligroso que Castillo vaya a Huancayo, más aún si hay una violencia muy fuerte. Es difícil que el presidente vaya, pero creo que tiene que buscar el diálogo a través de representantes, sino el tema no va a avanzar. No creo que le corresponda ir. Pasó en Conga con Humala, que la gente le pedía que sea él quien se presente, pero no fue, sino el presidente del Consejo de Ministros, que en ese tiempo era Salomón Lerner”, enfatizó.
Finalmente, apuntó a que sea el primer ministro, Aníbal Torres, el encargado de llegar a la región de Huancayo para solucionar el problema. En ese sentido, añadió que otra alternativa podría ser el envío de facilitadores como la Defensoría del Pueblo y el Diálogo Nacional.
“En todo caso, le correspondería ahora esa labor al premier Aníbal Torres. O también una alternativa puede ser buscar facilitadores. Está la Defensoría del Pueblo, el Diálogo Nacional. Ahí hay dos mecanismos de diálogo. Creo que es una opción. Tratar de convencer a los dirigentes de transporte que es necesario un diálogo”, culminó.
Tras el alza en el precio del combustible, el Gremio Nacional de Transportistas de Carga (GNTC) anunció el paro indefinido del sector desde el último lunes 28 de marzo. De acuerdo con los trabajadores, sus reclamos se deben al incremento del precio del combustible en un 37% y el aumento del costo del flete. Asimismo, exigen la eliminación del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) que pesa sobre la gasolina
Recién el jueves 31 de marzo, el presidente de la República, Pedro Castillo, tomó cartas en el asunto y manifestó su plena disposición de dialogar. Sin embargo, desde una de sus actividades oficiales, realizada en la ciudad de Piura, aseguró que algunas de las manifestaciones a raíz del alza en el combustible correspondían, en realidad, a las malas intenciones de algunos dirigentes y cabecillas que actuaban a cambio de un pago. Por tanto, enfatizó en que era necesario poner orden en las próximas horas.
“Se están anunciando algunos paros y bloqueos en las carreteras, malintencionados y pagados (por) algunos dirigentes y algunos cabecillas, que es necesario decirles que pondremos orden en las próximas horas porque, primero, nosotros venimos de esa cantera de la lucha, que muchas veces hemos tomado espacios para que nos escuchen”, dijo el mandatario.
Lejos de sofocar el ambiente caldeado y ante las manifestaciones cada vez más violentas de los transportistas, Castillo avivó el fuego con sus declaraciones. Es así que un día después, desde Arequipa, un grupo de camioneros respondieron indignados ante tales acusaciones. Los trabajadores tomaron las palabras del mandatario como una falta de respeto, pues alegaron que el jefe de Estado no conocía a las personas a las que se refiere.
“¿Usted conoce a mi persona, conoce a los dirigentes que están en todos los departamentos del Perú en este paro? ¿Usted puede comprobar lo que está manifestando, que los dirigentes han recibido plata? Pensé que usted podía hacer un cambio en el país. ¿Qué tipo de dirigente es usted, cuando usted supuestamente ha representado a los profesores? Lo que usted está mostrando es una falta de respeto y educación al sector dirigencial”, expresó un ciudadano que se identificó como Javier Corrales, quien, además, señaló que había dirigido una oficina anticorrupción por cuatro años.
La respuesta de los transportistas no quedó en palabras y se dio inicio a una ola de saqueos que afectó, sobre todo, a la ciudad de Huancayo. Visto ello, la Presidencia del Consejo de Ministros informó que realizará una sesión descentralizada en Junín el próximo jueves 7 de abril. No obstante, los manifestantes exigían que el presidente Castillo dé la cara.
Durante una transmisión de Canal N, en los exteriores del Coliseo de Huanta (donde se tiene previsto instalar la mesa de diálogo), numerosas personas exigieron la presencia de Pedro Castillo en el lugar con el fin de atender la necesidad de la población.
“(Me siento) totalmente indignado. El señor presidente (Pedro Castillo) debería estar acá, debe dar la cara, ¿Por qué no da la cara?, ¿por qué se esconde?. No queremos a sus ministros, no queremos esa porquería”, señaló uno de los protestantes.
En paralelo, ya habían llegado seis ministros de Estado y dos viceministros a la región de Junín para ver la posibilidad de establecer un consenso con la población. Pero los manifestantes continuaron pidiendo la presencia del gobernante.
“Queremos la presencia del presidente porque él ha ofendido al pueblo diciendo que somos vagos, delincuentes y pagados. No es así señores. El pueblo no está pagado, el pueblo se está levantando porque él está abusando. Ahora está en San Martín, ¿por qué no viene a Huancayo?”, enfatizó un ciudadano.
Tarde llegaron las palabras de Pedro Castillo, quien recién este sábado, desde la ciudad de Cajamarca, se mostró convencido de “salir adelante de estos tropiezos y movimientos que se están dando por justas causas”.
“(Si) en algunas de esas declaraciones hubo un malentendido y lo tengo que aclarar pidiendo disculpas o perdón al pueblo, lo tengo que hacer 1.000 veces, porque jamás tengo malas intenciones. Yo vengo de esa cantera de la lucha y sé cómo se conduce una medida de lucha. Pero también hemos sentido que a veces (sic) existen personas que se infiltran a las medidas de lucha y hacen quedar mal a los buenos dirigentes”, indicó Castillo.
El mandatario agregó que los representantes del Ejecutivo han recibido “instrucciones para que den soluciones inmediatas y que serán anunciadas en las próximas horas”. También alzó su voz a los manifestantes para precisar que “no hay necesidad de poner trabas en una vía de comunicación, háganlo mediante el diálogo”.