La jueza suprema convocada para dirimir en la casación de Keiko Fujimori, Susana Castañeda Otsu, solo se plegará a una de las dos posiciones en discordia en la Sala Penal Permanente respecto al plazo de la prisión preventiva que pesa contra la lideresa de Fuerza Popular, y no creará otro escenario en el que se plantee un plazo distinto al de 18 o 36 meses de la medida restrictiva ni, mucho menos, planteará su libertad.
Así lo aclaró la misma jueza Castañeda Otsu en una interrupción a la abogada de Keiko Fujimori, Giulliana Loza, cuando la letrada exponía que la prisión preventiva contra su representada era injusta.
“Señora abogada, usted sabe que no voy a poder, como magistrada dirimente, pronunciarme sobre los presupuestos de la prisión preventiva, porque cinco votos han dicho que [la medida restrictiva contra Keiko Fujimori] es conforme. Lo que vamos a ver es el plazo", le advirtió desde el comienzo de la audiencia la magistrada a la abogada Loza.
La jueza suprema, en ese sentido, entendió que la abogada no formularía "agravios respecto a la exigencia de motivación referida a la duración de la prisión preventiva”.
Consultada por La República, la constitucionalista Romy Chang explicó que la casación, en efecto, es “un pedido que, más que mirar el fondo del caso en concreto, lo que mira es la correcta o no interpretación de las normas” Por ello, la abogada estimó que lo que la jueza Castañeda Otsu "ha querido decir es: 'por si acaso, yo no estoy para mirar si los argumentos concretos que tú esgrimiste en tu caso son o no son correctos. Yo voy a mirar si las normas se han ido interpretando correctamente sobre el tema’”.
Mientras la abogada de Keiko Fujimori continuaba con su exposición de argumentos, la jueza Castañeda Otsu, en otra interrupción, le aclaró a la letrada que lo que estaba escuchado, “para los fines a que he sido citada, no me serviría de mucho”.
En detalle, la magistrada explicó que esto era así “porque el argumento del voto de los tres señores jueces de la Corte Suprema [Hugo Príncipe, Zavina Chávez y Jorge Castañeda, quienes plantearon reducir el plazo a 18 meses] es que no es lo mismo el peligro de fuga que el entorpecimiento de la actividad probatoria [por]que no tienen la misma intensidad. El argumento de los dos señores magistrados [Iván Sequeiros e Iris Pachecho, que votaron por declarar infundada la casación] es que es igual”.
"Yo pensaba escuchar algo en relación a ese punto, pero entiendo su posición. Ustedes siempre consideraron que no debería haber ningún tipo de plazos sino libertad. Y esa fue su pretensión para la cual llegaron a la Corte Suprema”, dijo la magistrada en la audiencia.
En esa orden de ideas, para la constitucionalista Romy Chang, lo que manifestó la jueza suprema Susana Castañeda es básicamente "decirle a la defensa de Keiko ‘mira, por si acaso yo no me voy a pronunciar por la libertad, yo lo que voy a hacer es decir si corresponde la postura A o la postura B”.
Luego de escuchar los alegatos de los abogados de Keiko Fujimori y los coimputados Jaime Yoshiyama, Pier Figari y Luis Mejía Lecca, la jueza Susana Castañeda anunció que emitirá su voto dirimente el próximo 12 de setiembre, tras lo cual concluyó la audiencia.