Es más, nadie debería temer al qué dirán. Las enseñanzas pueden provenir de cualquier lugar.,Sin duda, en cada una de nuestras etapas formativas, ya sea escolar o profesional, nos topamos con libros de texto, cuentos, novelas y autores con gran sabiduría que nos dejan una que otra frase memorable, invitándonos a reflexionar y a ponerla en práctica a lo largo de nuestras vidas. Curiosamente, parte de estas enseñanzas llegan de personajes ficticios, con perspectivas y creencias únicas, a quienes solo debemos nuestra admiración. Tal vez, amigo lector, le resulte extraño lo que leerá a continuación. Y es que, a modo de homenaje y siendo 6 de febrero, día de su nacimiento, a mi generación nos tocó ser testigos de la sapiencia y clase de Mewtwo. Modificado genéticamente producto de experimentos, el pokémon registrado con el número 150 en la Pokédex y protagonista de la primera película de la franquicia de Pokémon, Mewtwo contraataca, expresó, tras reconocer la valía de los humanos y sus pokémon, lo siguiente: “Las circunstancias en que uno nace, no tienen importancia. Es lo que uno hace con el don de la vida lo que nos dice quiénes somos”. Tras analizar su propia existencia, dejar a un lado el rencor por ser objeto de pruebas científicas y cuestionar las decisiones que ha tomado luego de liberarse de las garras del malvado Giovanni, jefe del equipo Rocket, Mewtwo nos regala estas líneas que, con toda seguridad, pueden ser determinantes en la vida de una persona. A mis 25 años no me da vergüenza decir que aprendí de un pokémon. Es más, nadie debería temer al qué dirán. Las enseñanzas pueden provenir de cualquier lugar. Todo depende de cómo las interioricemos para conseguir nuestros objetivos.