Apelación. Corte Suprema verá este miércoles el recurso contra la absolución de militares por el asesinato y desaparición de nueve campesinos, con el objetivo de eliminar testigos de la masacre en 1985.,El crimen y la desaparición de nueve campesinos para ocultar la matanza de pobladores de la comunidad ayacuchana Accomarca, cometida en agosto de 1985, no ha hallado justicia. La Sala Penal Nacional absolvió a los acusados, y este miércoles la Corte Suprema escuchará el sustento de la apelación de sus familiares. El abogado del Instituto de Defensa Legal (IDL), Carlos Rivera –que representa a las víctimas– remarca que existen elementos suficientes para condenar al entonces jefe del comando político militar de Ayacucho, Wilfredo Mori Orzo, por haber ordenado la “operación limpieza” para eliminar testigos de la masacre cometida días antes por personal del Ejército. PUEDES VER Exmilitar capturado estaba en la lista de los más buscados Sostiene que Telmo Hurtado, condenado el año pasado por haber encabezado la patrulla que asesinó a más de 60 campesinos de Accomarca, reveló durante el proceso judicial que Mori Orzo personalmente le dio esa orden, cuando el caso se hizo público. Varios testigos La misma sentencia señala que el 13 de setiembre de 1985 una comisión del Congreso llegó a la zona para comprobar las denuncias sobre la matanza y halló adicionalmente siete cadáveres en el cementerio. El entonces diputado Fernando Olivera relató ante la Sala que los cuerpos estaban aún sangrando y con temperatura, y había casquillos de bala en los alrededores. “Según su apreciación, era evidente que acababan de asesinar a esos pobladores para eliminar testigos”, se lee en el fallo. Las víctimas fueron posteriormente identificadas como Cecilio Gamboa Mendoza, Padua Quispe Chuchón, Ciriana Quispe Martínez de Gamboa, Agustina Melgar de Baldeón, Marcelina Janampa viuda de Pujaico, Brígida Pérez Chávez y Alejandro Baldeón Pérez. Pese a los detalles que dio Hurtado, señalando que llegaron en helicóptero tres horas antes del arribo de la comisión parlamentaria, precisando cómo sacaron a los pobladores de sus viviendas y para asesinarlos en el cementerio –lo que fue corroborado por otro testigo–, el tribunal absolvió a Mori Orzo y a otros cuatro encausados. Dos desaparecidos De la misma manera, en su sentencia del año pasado, la Sala presidida por el magistrado Ricardo Brousset absolvió al jefe de la base de Vilcashuamán (que tenía jurisdicción sobre Accomarca), Helber Gálvez Fernández, por la detención y desaparición de Manuel Baldeón Ayala y su esposa Paulina Pulido Palacios. El hijo de ambos, Avelino Baldeón, denunció que su padre fue detenido el 9 de setiembre de 1985 por una patrulla militar y llevado a dicha base contrasubversiva. Su madre acudía a diario a llevarle la comida, hasta que una semana después fue retenida en el destacamento militar. Poco después de lo ocurrido dirigió una carta a la Comisión de Derechos Humanos del Senado en la que indicaba que detuvieron a sus padres por ser testigos de las acciones que cometían los militares en la zona. “Los jueces absuelven al jefe de la base de Vilcashuamán sobre la base de su declaración, negando haberse enterado de este hecho. Pero hay documentos que demuestran que sí lo sabía”, refiere. Se trata de documentos de la época de la Cámara de Diputados y del entonces senador Javier Diez Canseco dirigidas a las autoridades militares, exhortando la ubicación de los esposos Baldeón Pulido. Pero además, está la respuesta de la Segunda División de Infantería indicando que consultaron a la “dependencia pertinente”, que en este caso es la base de Vilcashuamán. A esto hay que sumarle testimonios de un familiar que los vio allí. La audiencia de apelación podría frustrarse nuevamente Uno de los jueces del tribunal de la Corte Suprema, designados para absolver la apelación, ha visto el caso con anterioridad, lo que pondría en riesgo la realización de la audiencia del miércoles. Se trata de la magistrada Elvia Barrios Alvarado, quien años atrás, cuando fue fiscal, formuló acusación en este caso. Por ese motivo, ella no podrá integrar el tribunal, así que tendrá que inhibirse. Esto afecta a los familiares, quiénes han sido citados para este miércoles a las 9 de la mañana, pero al no estar completo el tribunal, tendrán que esperar hasta que las otras salas acaben con sus casos para ver si uno de los jueces puede integrarlo. El presidente de la sala es el magistrado José Luis Lecaros.