El rompimiento comercial entre Perú y México ha tenido sus primeras reacciones. El 26 de mayo, el jefe de Estado Andrés Manuel López Obrador (AMLO) dijo, por primera vez, desde que su homóloga Dina Boluarte asumió la jefatura del país hermano, que "no quiere relaciones económicas" con su Gobierno.
La tensión entre ambos países aumentó por sus declaraciones "injerencistas" y la negativa centroamericana de traspasar la presidencia pro tempore de la Alianza del Pacífico. La investigada mandataria peruana decidió el retiro del embajador Manuel Talavera. El siguiente paso lo dio AMLO tras ser declarado no grato por el Congreso de la República.
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A sabiendas del viniente impacto macroeconómico, el Consejo Empresarial Mexicano le envió una carta a López Obrador el reciente 28 de mayo. Juan Carlos Pérez Góngora redactó con "gran indignación" el "rechazo" a la suspensión comercial entre ambas naciones. Desde hace más de 10 años, Perú y México acordaron formar un extenso mercado que, a la fecha, es de aproximadamente 160 millones de consumidores.
Para Pérez Góngora, AMLO se "apresuró" en "obstaculizar unilateralmente el intercambio de bienes y servicios". "Del pleno respeto que dice tener por el pueblo peruano, expresando que es mucha pieza independientemente de su Gobierno, no existe argumento visible y no es congruente sacrificar el beneficio de la actividad comercial que, con gran esfuerzo, se ha construido por muchos años entre empresarios de ambos países", escribió.
Oficio del Consejo Empresarial Mexicano a López Obrador. Foto: @CEMexicano/Twitter
Aunque hay críticas legítimas de López Obrador contra Boluarte Zegarra como el cuestionamiento a la situación de los derechos humanos y la centralización de poder parlamentario, así como la nula declaración sobre la independencia de instituciones amenazadas, también la calificó de "usurpadora". La sucesión del máximo cargo cumplió con los estándares del derecho internacional humanitario al respetarse lo descrito en la Constitución de 1993.
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Otro argumento que el mandatario enunció fue a favor del expresidente Pedro Castillo. En más de una ocasión, AMLO pidió su liberación y restitución. Quien fue compañero de fórmula de la ahora presidenta es investigado por el presunto delito de rebelión y se encuentra preso en el penal de Barbadillo, en Ate, Lima.
El canto de AMLO es acompañado en coro por 22 de los 32 gobernadores mexicanos. El reciente 27 de mayo, los funcionarios respaldaron las declamas en beneficio del exmaestro de escuela rural y sindicalista de izquierda.