La comisión de controversias de la Federación Mexicana de Futbol le dio la razón al club América ante el reclamo del futbolista Salvador Cabañas por más de un millón de dólares de salarios atrasados. Las Águilas se niegan a pagar argumentando que el incidente ocurrió fuera de los horarios de trabajo del jugador. Los representantes legales del club sostienen que se encontraba en un lugar inapropiado en el momento de recibir el balazo en la cabeza, mientras que los abogados del deportista paraguayo discuten que la agresión tuvo mucho que ver con que fuera un jugador del América. Ambas partes se reunieron un par de ocasiones en las oficinas de la Federación Mexicana sin llegar a un acuerdo y dejaron la solución en manos de la justicia. "Informalmente la FMF nos informó (la resolución) por un simple correo electrónico. Hablamos para pedir un documento y nos dijeron que nos diéramos por bien servidos con eso", declaró el abogado de Salvador Cabañas, Rogelio Ruiz Irigoyen. "Desde un principio no teníamos ninguna confianza en la FMF; sabíamos y sabemos que los dados están 100% cargados al América y a Televisa, por lo que vamos a recurrir a las instancias internacionales, en primera instancia al TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo)", añadió el abogado refiriéndose a la institución de justicia del deporte con sede en Suiza. El jugador se somete actualmente a un tratamiento ambulatorio en Asunción con la esperanza de recuperar totalmente sus capacidades físicas y cognitivas. La bala sigue alojada en el cráneo de Cabañas. Como conclusión final, Ruiz Irigoyen agregó que tienen "plena confianza en el TAS", ya que "allí no existe ningún tipo de influencia de nadie". Dicho organismo, creado por el Comité Olímpico Internacional, garantiza la imparcialidad en este tipo de conflictos entre futbolistas y clubes de fútbol.
