El pasado miércoles 1 de mayo de 2024, la cifra de muertes aumentó a 13, y las personas desaparecidas, a 21, debido a los temporales que azotan a Rio Grande do Sul, de acuerdo con el último informe emitido por la Defensa Civil de ese estado brasileño.
El informe señala que 104 municipios resultaron afectados, con 1,431 personas desplazadas y 1,145 alojadas en refugios. La principal prioridad del Gobierno local es rescatar a las familias que han quedado aisladas. Ayer, el gobernador Eduardo Leite se comunicó vía teléfono con el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien aseguró que habrá apoyo federal para las labores de asistencia.
"Seguimos trabajando intensamente para localizar a los desaparecidos y garantizar la seguridad de las comunidades en áreas de riesgo. Desafortunadamente, todavía hay predicción de más lluvia", escribió Leite, a través de sus redes sociales.
En algunas áreas existe un riesgo de inundaciones, con una 'situación severa' en los valles de Caí y Taquari, donde ya se habían desbordado las aguas en noviembre pasado. Foto: AFP
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La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) ha movilizado dos helicópteros para ayudar con el rescate de las personas afectadas por las inundaciones, en la región de Santa María. En una de sus operaciones, la FAB logró rescatar a una familia que se encontraba atrapada en una vivienda en peligro de derrumbe.
Los temporales han estado azotando a Rio Grande do Sul desde el lunes y, según previsiones de la Defensa Civil, se espera que el alto nivel de precipitaciones continúe hasta el viernes.
Actualmente, hay informes de carreteras obstruidas y daños en escuelas, lo que ha llevado a la suspensión de clases. Además, varios municipios enfrentan problemas de suministro de agua, energía eléctrica y servicios de telefonía.
Las autoridades han intensificado las labores de rescate en el municipio de Candelaria, el cual se encuentra en un 'estado crítico'. Foto: AFP
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La región ha experimentado ciclos más frecuentes de condiciones climáticas adversas. Funcionarios han recordado que, en la segunda mitad de 2023, fuertes lluvias causaron el desbordamiento del río Taquari, lo cual resultó en devastación, pérdidas materiales significativas y alrededor de 50 fallecimientos.
"Los valles de Caí y Taquari están en una situación crítica, con un riesgo de inundaciones comparable al de los eventos de noviembre, cuando el estado sufrió una de las peores inundaciones de su historia", ha informado el Gobierno del estado.
A finales de marzo, intensas lluvias en el sureste de Brasil resultaron en, al menos, 25 muertes en los estados de Rio de Janeiro y Espírito Santo. Foto: AFP
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El presidente Luiz Inácio Lula da Silva habló con Eduardo Leite, el gobernador del estado, y le ofreció ayuda, tal como lo publicó en la red social X.
"El gobierno federal se sumará a los esfuerzos del Gobierno del estado y de municipalidades para atravesar y superar este momento difícil, reflejo del cambio climático que afecta el planeta”, sostuvo da Silva.