No es solo un parque de atracciones, sino también un testimonio viviente de la historia. Inaugurado hace aproximadamente 129 años, este emblemático lugar ha sobrevivido a los embates del tiempo, las cuales incluyen las devastadoras I y II Guerras Mundiales. A pesar de los desafíos, se mantiene en perfecto estado, en donde se ofrece diversión y entretenimiento a quienes lo visitan.
Desde su conversión de coto de caza imperial a espacio público en 1766, el Prater de Viena ha evolucionado hasta convertirse en un símbolo turístico de la capital austriaca. Este parque, que fusiona la historia y la diversión, atrae a visitantes de todo el mundo con su encanto y la elegancia de sus instalaciones que parecen inmunes al paso del tiempo.
Se trata de uno de los parques de atracciones más antiguos del mundo: el Prater de Viena. Es uno de los destinos obligatorios al viajar a la capital austriaca, pues tienen aproximadamente 50 atracciones para todas las edades.
En este atracción, se pueden encontrar carruseles, montañas rusas, pero el principal punto de visita es la Noria del Prater. Ella es una rueda en posición vertical con góndolas o cabinas que ofrecen una maravillosa vista del parque y de la ciudad de Viena.
El Prater de Viena, como su nombre lo indica, se encuentra en Viena, Austria, específicamente en el distrito de Leopoldstadt, y fue inaugurado en 1895. Originalmente utilizado como coto de caza imperial, se abrió al público en 1766 y se transformó radicalmente en el siglo XIX para convertirse en el parque de atracciones que conocemos en la actualidad.
El Prater y la majestuosa área verde de Stadtpark crean la ilusión en el visitante de haberse trasladado a cientos de kilómetros de la ciudad. A lo largo de su historia, toda esta área de jardines ha experimentado numerosos cambios, pero aún mantiene los elementos que la convirtieron en un lugar de recreación para los habitantes de Viena en el pasado y que continúan atrayéndolos en la actualidad.
Durante la I Guerra Mundial, la actividad del parque se detuvo por dos años, y en la II Guerra Mundial, en 1945, sufrió daños significativos debido a los bombardeos.
La Noria Gigante de Viena, inaugurada en 1897, es un símbolo de resistencia y supervivencia. Esta atracción, que celebra el reinado de Francisco José I, se alza a 60 metros sobre el suelo y ofrece vistas panorámicas de la ciudad. Sin embargo, sufrió daños en la II Guerra Mundial y tuvo que ser reconstruida y ahora es una de las atracciones más populares del parque.
El Prater de Viena alberga una variedad de atracciones para todas las edades, entre las cuales tenemos:
El Prater de Viena es de fácil acceso en transporte público, con varias líneas de tranvía y metro que llegan al parque. La estación de metro más cercana es Praterstern, servida por las líneas U1 y U2. También se puede llegar en tranvía, por medio de las líneas 1, 2, 5, 6, O y N.