Durante la noche del domingo 28 de agosto, la Policía de Bolivia lanzó un megaoperativo para encontrar el celular del expresidente Evo Morales, luego de que asegurara que fue víctima de un robo en pleno acto de campaña en un municipio ubicado al este de ese país.
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El sábado 27 de agosto, Morales participó en cierre de la campaña “Rufino Alcalde” para impulsar la candidatura de Rufino Correa, un aspirante del Movimiento Al Socialismo (MAS) para el Municipio de La Guardia, en el departamento de Santa Cruz. Ese día, estuvo acompañado por otros miembros partido, como la ministra de la Presidencia, Marianela Prada, y el de Gobierno, Eduardo del Castillo.
A las 8.30 p. m. de ese día, el exmandatario advirtió que su teléfono celular había sido robado, por lo que ordenó de inmediato una “movilización aparatosa de la Policía Boliviana”, según informó el portal de El Deber.
El comandante nacional de la Policía general, Orlando Ponce, dirigió la misión que desplegó unidades de las fuerzas de seguridad y agentes de inteligencia del grupo de investigadores especiales DACI para realizar un “rastrillaje intenso”, con el propósito de dar con el autor del hecho lo antes posible.
El medio destaca que la inmediatez de la búsqueda recae en que existe temor por el acceso a la información y los contactos que mantiene Morales. Asimismo, detalla que el móvil podría no tener patrón de seguridad.
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Varios agentes de seguridad, a pesar de estar fuera de su horario laboral, fueron obligados a participar en la búsqueda del dispositivo electrónico del expresidente, según declararon varias autoridades que prefirieron no identificarse.