El presidente de Colombia, Iván Duque, habló este sábado 2 de abril por teléfono con su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, a quien expresó el apoyo de su país ante el “ataque vil y desproporcionado” de Rusia contra Ucrania, y destacó la ayuda humanitaria brindada al pueblo ucraniano.
La conversación telefónica, que duró cerca de 20 minutos, se dio durante la agenda que Duque lleva a cabo en La Uribe, en el departamento del Meta (centro), desde donde indicó que fue “una llamada conmovedora”.
Duque dijo en un acto que Zelenski “le ha demostrado al mundo su valentía” y es “un ejemplo en la defensa de la soberanía de su pueblo”, e insistió en la “condena” a los ataques de Rusia.
Ucrania “ha sido víctima de un ataque vil y desproporcionado, de una violación sistemática del derecho internacional humanitario y de hechos atroces, como los bombardeos de hospitales de maternidad y la destrucción de su infraestructura”, lamentó el mandatario colombiano.
“Estos actos de horror tienen que llegar al final. El mundo tiene que seguir condenando estos hechos”, pidió Duque, quien insistió en que, como socio global de la OTAN y a través de la comunicación diplomática, Colombia está brindando “el respaldo que se requiera para enfrentar una situación tan difícil, incluida esa migración masiva de ciudadanos que salen a buscar en algún lugar un refugio, una mano amiga”.
El mandatario expresó a su homólogo “la solidaridad de Colombia, no solo con él sino con todo el pueblo ucraniano, que se defiende hoy de todas las maneras posibles contra este oprobio y que merece la solidaridad del mundo entero”.
Duque hizo además un llamado a “Vladimir Putin y a Rusia: “Basta ya de este horror y de esta guerra; esto solamente trae desolación y dolor”.
En este sentido, también indicó que está buscando “movilizar a más países de América Latina” para expresar apoyo y “para movilizar más ayuda humanitaria” a Ucrania.
Por su parte, el presidente ucraniano se mostró a través de sus redes sociales “encantado” de haber podido hablar con Duque, y agradeció a Colombia “su ayuda humanitaria y la consolidación de los países sudamericanos en apoyo de Ucrania”.
Además, adelantó que aprovecharon la llamada telefónica para acordar “iniciar proyectos económicos y defensivos conjuntos después de la guerra”.