“Lanzar una señal con repetidores WiFi desde la embajada estadounidense en La Habana y otra desde la base naval de Guantánamo sería una “alternativa rápida” para una Internet abierta en Cuba”, dijo a la agencia de noticias EFE Salvi Pascual, quien hace ocho años creó en Miami la aplicación para móviles Apretaste!, para conectar a la red a los cubanos de la isla y burlar la censura.
“Hay acciones que son morales y correctas de tomar, no estoy hablando de poner una bomba, solo de un repetidor Wifi, como cuando vas al McDonald’s y te regalan Internet”, dice Pascual sobre la vieja idea del Gobierno estadounidense de llevar a la isla la Internet abierta para contrarrestar la censura.
Para este programador, que creó Apretaste! con la misión de conectar “a miles de cubanos a Internet de la manera más económica y sin censura”, la enmienda aprobada recientemente por el Senado estadounidense para crear un fondo de inversión tecnológica dirigida a Cuba es “una buena alternativa”, pero no suficiente.
“Me alegra que tomen cartas en el asunto, están intentando ganar terreno para el momento en el que el Gobierno de Cuba quiera infraestructuras”, dice Salvi sobre la enmienda presentada por los senadores republicanos por Florida Marco Rubio y Rick Scott y aprobada por el Senado el pasado 11 de agosto.
La medida pide establecer un fondo de reserva para facilitar el suministro de Internet a los ciudadanos de Cuba “privados del flujo libre de información por el régimen comunista ilegítimo cubano”.
Según Pascual, una docena de cables submarinos trasatlánticos que conectan continentes o países a la gran red pasan cerca de Cuba, pero el régimen de la isla no ha dado señales de querer conectarse a ninguno de ellos y funciona con uno que les llega desde Venezuela.
“La mayoría de esos cables responden a colaboraciones entre Gobiernos y entidades privadas. Cualquiera de ellos está abierto a Cuba desde el tiempo del deshielo (durante la presidencia de Barack Obama) para que la isla se pueda conectar”, afirma.
La razón es “una falta de voluntad política” y no un asunto tecnológico, dice. “Habría que buscar en el corazón de nuestros dirigentes (en Cuba) por qué no lo han hecho. Yo asumo que es porque no quieren perder el control de la infraestructura dentro de la isla. No quieren que su servicio pase por una infraestructura que no esté completamente controlada por ellos”.
Pascual se refiere a la única compañía suministradora de Internet en la isla, ETECSA, que es estatal.
Salvi Pascual desarrolló la app hace ocho años con la intención de conectar Cuba sin restricciones y de modo más económico. Foto: EFE
“Todas las pruebas que hemos recabado apuntan a que el cable que conecta a Cuba con Venezuela no tiene todo el ancho de banda requerido. Un cable es lo mismo que una tubería de agua central, que tiene que ser buena y con buen caudal”, detalla.
Si EE.UU. actúa para proveer de Internet abierta a los cubanos “demostraría que la falta de una buena Internet no se debe al embargo, sino que es responsabilidad del Gobierno cubano al 100%”, puntualiza. Pues “no hay ninguna ley internacional que lo prohíba”.
“En la base naval de Guantánamo hay un McDonald’s, el único existente en Cuba. Ahí se pueden poner repetidores de T-Mobile, por ejemplo”, dice con seguridad.
Tras lo ocurrido el 11 de julio pasado, cuando miles de personas salieron a las calles en Cuba para pedir libertad y mejores condiciones de vida en medio de una fuerte crisis económica y sanitaria, Pascual se dio cuenta de que su app tiene pocos usuarios fuera de Cuba.
Su aplicación para teléfonos móviles, que utiliza el correo electrónico como conexión para llegar a la gente burlando la censura, tiene un 98% de sus usuarios en la isla, por lo que ahora trabaja en una versión mejorada para captar a los de afuera.
A finales de septiembre presentarán “la versión 8 mejorada” de Apretaste!, “mucho más rápida y amigable”, y que consume “menos datos”, detalla.
Pascual dice que quiere estudiar bien a fondo la enmienda que requiere a la Administración del presidente de EE.UU., Joe Biden, que “facilite acceso libre, abierto y sin censura a Internet para el pueblo de Cuba”, según un comunicado en la web del senador Rubio.
“El Gobierno (cubano) tiene bien cuadriculado esto. Creo que el ‘swtich’ de cortar Internet está en la mesa del presidente”, insiste.
“Pero no quiero ser pájaro de mal agüero. Hay cosas que están ocurriendo ahora mismo en Cuba. El Gobierno sabe que se le va a ir de las manos algún día y está entre la espada y la pared”, acotó.