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Piñera recurrió al Tribunal Constitucional para frenar retiro de pensiones

La noche de este martes, ciudadanos de diferentes ciudades del país protestaron con cacerolazos en contra del proyecto enviado por el Ejecutivo.

larepublica.pe
Piñera afirmó que su Gobierno irá al Tribunal Constitucional (TC) si el Congreso aprueba el proyecto que permitiría un tercer retiro de ahorros desde las AFP. Foto: AFP

El Gobierno de Chile recurrió este martes al Tribunal Constitucional para frenar el proyecto de ley que permite un tercer retiro del 10% de los fondos de pensiones, según señaló el ministro de la Secretaría General de la Presidencia (Segpres), Juan José Ossa, desde el palacio presidencial de La Moneda en Santiago.

“Es nuestro deber velar porque las reglas que actualmente nos rigen sean respetadas”, señaló el jefe de la Segpres, flanqueado por los ministros de la Secretaría General de Gobierno, Jaime Bellolio, y el ministro de Hacienda, Rodrigo Cerda.

Según Ossa, el proyecto de retiro anticipado de fondos de pensiones, tercero en tramitarse en lo que va de la pandemia en el país suramericano, “atenta contra la calidad de vida de los chilenos”.

El anuncio se da luego de que la Comisión de Constitución del Senado, organismo donde la iniciativa cursa su último trámite legislativo, aprobara el documento en general y programara su inminente votación en sala para el jueves que viene.

La posibilidad de presentar un requerimiento ante Tribunal Constitucional había sido anticipada por Ossa, que asistió al debate parlamentario desarrollado en comisiones, así como por el mismo presidente Sebastián Piñera en ruedas de prensa.

Presentada por varios grupos de congresistas, en los que también figuran representantes del oficialismo, la medida de un tercer retiro anticipado de fondos de pensiones fue impulsada bajo el argumento de que los 18.000 millones de dólares en ayudas anunciadas por el Gobierno “no están llegando a la gente”.

Frente a estas críticas, fue el mismo Piñera quien anunció, el último lunes, un nuevo paquete de aportes fiscales equivalente a 5.500 millones de dólares para hacer frente a la crisis económica en Chile, que según cifras del Banco Mundial implicó que 2,3 millones de personas pasaran de la clase media a un estado de vulnerabilidad.