Suecia, uno de los países destacados por su modelo para enfrentar la pandemia del coronavirus, vive un particular episodio en su paso a la llamada nueva normalidad que incluye guías turísticas muy especiales.
Con poco más de 10 millones de habitantes, Suecia mantiene aplanada la curva del virus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad COVID-19, confirma 51.614 casos positivos y 4.874 víctimas mortales, de acuerdo al sitio web de referencia en cuanto a estadísticas en tiempo real, Worldometers.
Para relanzar su actividad afectada por la pandemia de COVID-19, un guía turístico sueco ofrece una visita con la historia de las epidemias que azotaron a Estocolmo.
Visitantes son fotografiados el 30 de mayo durante una visita de 'caminata de la peste' por el guía Mike Anderson en la capital sueca. Foto: AFP
Bajo un sol de verano, Mike Anderson dirige un pequeño grupo de apasionados de historia por las calles de Gamla Stan, el corazón histórico de Estocolmo.
A la sombra de los edificios naranjas y amarillos que bordean las calles del casco antiguo, las paradas se suceden una tras otra para detallar las huellas de las epidemias en la capital sueca.
"Es bastante interesante cuando vemos lo que está sucediendo hoy, lo relacionamos con la historia y vemos que la gente ya pasó por esto", explica el guía a la AFP.
Vestido con una larga y pesada camisa de algodón y con la cara cubierta por una máscara de pico largo, Anderson conduce al grupo por las calles adoquinadas del centro en lo que él llama la “marcha contra la peste”.
Para la ocasión, varios de los participantes del "paseo" le siguieron la corriente al guía, vistiéndose con ropa oscura como antaño, uno de ellos fabricó, incluso, una réplica de una máscara usada por los médicos en la Edad Media durante la peste.
Durante poco más de una hora, todos escucharon religiosamente a Anderson, mientras visitaban los lugares emblemáticos de las grandes epidemias, como la de la peste bubónica que devastó el país en 1350.
Andersos (2d) lleva a los visitantes por sitios en el casco antiguo de Estocolmo. Foto: AFP
Luego visitaron un cementerio en la ciudad para escuchar interiorizarse sobre la epidemia de peste que devastó Suecia y la región del Báltico en la década de 1710 y la epidemia de cólera a mediados del siglo XIX.
Si algunos en el grupo no saben qué paralelo hacer entre estas epidemias de otro tiempo y el nuevo coronavirus, todos parecen estar satisfechos con esta lección atípica de historia.
PUEDES VER: “Como si hubiese envejecido”: Científico asegura que el coronavirus está perdiendo carga viral
Para ilustrar su historia, el guía utiliza una serie de accesorios, y a veces corre y salta para sorprender al grupo por las calles del casco antiguo, una zona generalmente muy transitada, pero ahora vacío de turistas.
Si Suecia es uno de los pocos países de Europa que no ha impuesto el confinamiento de su población, aunque las reuniones de más de 50 personas quedaron prohibidas desde fines de marzo.
Cuando el número de reservas para sus habituales “caminatas de fantasmas” comenzó a disminuir, Anderson tuvo la idea de estas “caminatas contra la peste”.
Son, de cierto modo, "una especie de instinto de supervivencia", dijo.
Ahora, tiene la intención de ofrecer estos paseos más regularmente con la esperanza de que ayuden a los suecos a hacer frente al virus actual.
Con información de AFP