En medio de la cuarentena para evitar la propagación de la COVID-19, el jefe de la subcomisaria de la localidad de Camet, en Argentina, fue apresado tras ser denunciado por cobrar coima para permitir el tránsito de un ciudadano en pleno confinamiento.
La detención fue realizada por los efectivos de la propia Policía a cargo de la Jefatura Departamental tras el pedido de la fiscal Laura Mazzaferri y aprobada por el juez Santiago Inchausti, y el trabajo de la oficina de la Auditoria General de Asuntos de Seguridad de Buenos Aires.
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El hecho se registró el pasado viernes 3 de abril en el misma subcomisaria, donde el agente implicado, Alonso, habría recibido una caja con varios alimentos.
Aparte de los elementos de primera necesidad, se presume que también hubo dinero como “contraprestación de no haber labrado acta de infracción ni actuación alguna, ni secuestrar el vehículo a un comerciante por no contar con la documentación habilitante para circular”, según el informe de la Policía.
Hasta el momento no se conoce los detalles del incidente, pero se sabe que en primer momento dos oficiales del recinto policial hicieron la intervención y procedieron de acuerdo a la norma.
El conductor, intervenido por los guardias, empezó una fuerte protesta que ocasionó que el titular de la subcomisaria se hiciera presente y lo invitara a arreglar el inconveniente en privado.
Trasciende que en esa reunión, Alonso habría exigido un pedido ilegal para dejarlo circular y evitar la correspondiente amonestación.
Por su parte, el chofer fue imputado por cohecho activo por entregar una caja de alimentos y, probablemente, una suma de efectivo, además de la infracción por no acatar el aislamiento, medida dispuesta para frenar el avance del coronavirus.