Magaly Medina es una de las mayores divas de la televisión peruana. A lo largo de 25 años, alegró a los televidentes con su peculiar estilo de presentar ampays de farándula. Asimismo, uno de los momentos favoritos de la audiencia es cuando saca los pasos prohibidos al inicio de su programa.
Ya sea cumbia, reguetón, salsa o pop, la ‘Urraca’ hace frente a cualquier género musical y baila “con sus dos pies izquierdos”. Sin embargo, este detalle no siempre fue bien visto por el equipo de “Magaly TV”, en especial por su exproductor Ney Guerrero.
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En el marco de la conmemoración de su nuevo aniversario, la conductora reveló detalles inéditos que ocurren detrás de cámaras. El último 27 de octubre, habló sobre los pasos de baile que realiza religiosamente al inicio de cada uno de sus programas. “Bailo desde los inicios de mi programa, nadie lo hacía”, dijo.
“Mucha gente pensaba que me copiaba los bailes de otras personas. Este programa que tiene tanta historia, tantos videos acumulados por 25 años. Era algo que nadie hacía en aquella época, hasta que a mí se me ocurrió, que amo bailar aunque tengo dos pies izquierdos, empezar mi programa bailando”, agregó Magaly Medina.
El productor Ney Guerrero no consideraba apropiado este detalle y, por ello, se lo prohibía a la ‘Urraca’.
“Me prohibía que bailara porque decía que la gente quería información y no ver mi forma desastrosa de bailar, pero, como yo soy contreras, a mí dime no y voy a hacer todo lo contrario. Entonces, seguía bailando, hasta que, para terminar la discusión y la polémica al interior del programa, decidimos hacer un focus group para ver si a mi público le gustaba o no mis bailes”, sostuvo ‘Maga’.
Magaly Medina está orgullosa de sus "pies izquierdos" al bailar. Foto: archivo GLR
Magaly Medina celebra los 25 años de su programa de TV. Foto: archivo GLR
Para sorpresa del productor, el público apoyó a la ‘Urraca’. “El focus group arrojó que esos eran los momentos más divertidos que ellos tenían en casa, así que a partir de allí tuve carta libre para bailar como a mí se me antojara y por supuesto que, en esa época, era más sinvergüenza que ahora”, concluyó.