Jesús Alzamora y su esposa, María Paz González-Vigil, fueron acusados públicamente por el periodista Eloy Marchán de realizar publicidad a una empresa que presuntamente está en contra de la vacunación contra la COVID-19. Esta denuncia, publicada en Twitter, generó reacciones entre los cibernautas y entidades regulatorias.
En ese sentido, el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi) tomó conocimiento del caso y comunicó, mediante una respuesta a la publicación, que los están investigando.
“Hola @eloymarchan, agradecemos la información, ya estamos investigando el caso. El Indecopi monitorea constantemente que los influencers cumplan la normativa vigente. En esa línea, les recordamos que ya hemos iniciado investigaciones en este rubro”, mencionó la cuenta oficial del ente regulador.
Ante la ola de críticas, el exconductor de televisión decidió pronunciarse para aclarar lo mencionado por el hombre de prensa. Según precisó, él y su esposa se encuentran inmunizados contra la COVID-19 y calificó de “amarillista” la publicación del comunicador.
“Nosotros estamos vacunados y creemos en las vacunas. Que vayamos a atendernos a un local con medicina alternativa de ninguna manera es un endoso de la opinión que esa empresa pregone. Antes de mandar un tuit amarillista, pudiste preguntar. Pero es más bacán el morbo, ¿no?“, escribió con un tono de incomodidad.
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Eloy Marchán acusó a las dos figuras públicas de estar cometiendo “estafa e irresponsabilidad unidas” y etiquetó a la cuenta oficial de Indecopi para llamar su atención sobre el caso.
“María Paz Gonzales-Vigil y Jesús Alzamora son dos ‘influencers’ de Instagram que promocionan a Biotek, una empresa que está en contra de las vacunas y dice tener “una máquina que regenera las células dañadas por el COVID-19″. Estafa e irresponsabilidad unidas. @IndecopiOficial”, puso en el tuit.
Posteriormente a la denuncia, el periodista reveló que Jesús Alzamora lo bloqueó de sus redes sociales.
“Uno evidencia la irresponsabilidad de un ‘influencer’ al promover una empresa que “regenera células dañadas por COVID”, y la respuesta es: bloqueado en Twitter (la única red social que tengo). No es broma: esto de los ‘influencers’ es una plaga y el Estado debe tomar acciones”, mencionó Marchán.