Antiguas zonas convulsionadas por el cultivo ilícito de hoja de coca en San Martín, Huánuco y Ucayali, ahora son emporios naturales de parcelas cacaoteras.Desarrollo alternativo, Christian Ninahuanca A. Hasta hace poco más de 10 años las montañas del valle del Alto Huallaga eran dominadas por las plantaciones ilegales de hoja de coca, esparcidas sin discreción por los departamentos de San Martín, Huánuco y Ucayali , sembrando la criminalidad en esa zona del país. Actualmente, gracias a la decisión y el trabajo de miles de familias agricultoras, esta realidad fue cambiando para convertir al Alto Huallaga en un ejemplo del desarrollo alternativo, con cultivos exitosos como el café y el cacao. Se dice que hay un déficit en la oferta de 50 mil toneladas de cacao a nivel mundial y los precios subieron en las últimas semanas, por lo que tenemos grandes expectativas para este año, dice Gonzalo Ríos, gerente general de la cooperativa Acopagro, que agrupa a 2.000 productores que manejan 5.000 hectáreas en San Martín. Esta y otras alentadoras experiencias similares motivaron que ayer se presentara la Alianza Cacao Perú , cuya meta es promover la instalación de 28 mil hectáreas nuevas en San Martín, Ucayali y Huánuco, en beneficio de 23 mil familias en cuatro años. Vincent Ruddy, director de la Alianza Cacao Perú, dijo que con este modelo de desarrollo se generarán 18 mil empleos directos y se espera captar una inversión de US$ 60 millones. La iniciativa es impulsada por la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida) y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), por empresas y agricultores. "El propósito es posicionar al Perú como país líder del mercado global del cacao fino y de aroma", sostuvo Ruddy. En la ceremonia de ayer la jefa de Devida, Carmen Masías , indicó que esto es la suma de esfuerzos de los diversos actores de la cadena productiva y de negocios de cacao fino y de aroma, que traerá consigo tecnología de punta, un enfoque de trazabilidad (seguimiento del producto desde su origen hasta el mercado) y la garantía de una conexión ventajosa de los productores de cacao con los mercados. Masías destacó la labor del Estado, de los agricultores y de la cooperación internacional en el trabajo de erradicación de cultivos ilícitos. Resaltó la meta trazada del gobierno peruano y Devida de erradicar 22 mil hectáreas de hoja de coca, además de priorizar los cultivos alternativos. Los gobiernos regionales de San Martín y Ucayali, y otros once gobiernos locales de esas regiones y de Huánuco, se comprometieron como socios de la Alianza Cacao Perú para dar valor a la cadena del grano y cultivos asociados en sus respectivas jurisdicciones. La Alianza Cacao Perú facilitará el acceso al crédito a miles de agricultores, para lo cual seis bancos, incluyendo el Banco de la Nación, se comprometieron a brindar US$ 60 millones en servicios financieros adecuados y accesibles a los productores y sus asociaciones. ALIADOS ESTRATÉGICOS El viceministro de Agricultura, Juan Rheineck , afirmó que su sector apoyará a Alianza Cacao Perú, con el fin de generar oportunidades para la inclusión social y utilizar al cacao como producto alternativo a los cultivos ilícitos, como la coca. Consideró que todos los actores de la cadena productiva deben estar comprometidos en apoyar a los pequeños productores de cacao. Agregó que el Ministerio de Agricultura está comprometido a brindar apoyo y asistencia técnica a los productores de cacao fino de la Amazonía.