Un día como hoy, hace 105 años, se conquistó la jornada laboral de 8 horas en el Perú, tras denodados años de lucha de los trabajadores por el reconocimiento de un trabajo digno.
Como recuerda la Central General de Trabajadores del Perú (CGTP), a fines del siglo XIX la industria moderna se desarrollaba cada vez más. En esta época, "junto a la clase capitalista criolla, surgió el proletariado moderno", el cual se concentró en los sectores económicos del textil, alimentación, minería y agrícola.
"Aparecieron en escena los obreros, panificadores, portuarios, gráficos y ferrocarriles que conformaban las otras fuerzas sociales de notable importancia", señala el dirigente de Sutep, Alfredo Velásquez.
Finalmente, el15 de enero de 1919, se conquistó las 8 horas de trabajo gracias a la lucha de los obreros panaderos Estrella del Perú, textiles, tejedores, cigarreros, tipógrafos, albañiles, sastres y ferroviarios.
A nivel provincial la lucha se dio en Arequipa, Huacho, Sayán, Pativilca, Trujillo, Talara y Negritos, entre otros lugares.
Como resultado de estas heroicas jornadas de lucha que se iniciaron en el siglo pasado, el presidente José Pardo y Barreda (mediante el Decreto Supremo del 15 de enero de 1919) estableció en el Perú la Jornada de las 8 horas de trabajo.
El abogado laboralista Javier Mujica lamenta que, 105 años después de obtenida estsa victoria, las 8 horas laborales en el Perú sean letra muerta, incluso en el sector formal que alienta el Gobierno.
Mujica sostiene que, si bien el 70% del mercado laboral está inmerso en la informalidad, también el 70% pero de los formales está sujeto a contratos de corta duración. Lo peor de todo, es que el 50% de los formales gana sueldo mínimo o menos que eso, lo cual también se traduce en la consolidación de una economía puramente extractivista que depende de los costos internacionales de los commodities, mas no de la demanda interna.
"Como están contratados a plazo fijo y desean que sus contratos sean renvoados, se someten a reglas que, usualmente, les imponen trabajar más allá de las 8 horas. La inmesa mayoría no disfruta de un descanso y sacrifica el tiempo libre que debería dedicarle al cuidado de su salud, de su familia y de más oportunidades de desarrollo personal, a través dle estudio, por ejemplo", recalca.
Más allá de fortalecer la fiscalización laboral en el mercado peruano, Mujica recomienda "repensar el modelo económico heredado hace 30 años desde el fujimorismo", a fin de promover la sindicalización, como ocurre en países OCDE a los que el Perú aspira alcanzar, y dejar atrás los modelos basados en la "precarización de los trabajadores".