En las últimas semanas, luego del levantamiento de la cuarentena por la COVID-19, una gran cantidad de visitantes limeños ha comenzado a trasladarse al norte chico, especialmente la zona rural de Huaral, lo que ha dinamizado la economía por la demanda de servicios y el turismo.
Alexander Oriundo, agente inmobiliario de Amersur, sostiene que “Huaral ha servido de refugio para las familias limeñas debido a que posee un clima cálido ideal para disfrutar de la naturaleza y el campo los 365 días del año, y tiene los mismos servicios básicos de la capital”.
“La zona de mayor afluencia de gente es en Esperanza Alta donde antes la gente sólo venía de visita o para pasar un fin de semana, ahora existe la intención de querer quedarse a vivir y disfrutar los bellos paisajes, el río y la sensación de paz que reina”, agrega Oriundo.
Cabe destacar que la provincia de Huaral, a sólo una hora y media de Lima, es conocida por su variada gastronomía, la riqueza de su cultura y los atractivos turísticos que posee como Eco Truly Park, laguna de Santa Rosa en Aucallama, la ciudadela de piedra Rupac y Chiprac, Castillo de Chancay.
Los limeños disfrutan una mejor calidad de vida, viven sin prisas y además tiene una mejor alimentación debido a que es líder en agricultura, acotó. “Por lo tanto, Huaral se ha convertido en el nuevo destino ideal para el sector inmobiliario, por su gran acogida, gente hospitalaria, y zonas disponibles donde los capitalinos pueden tener su casa de campo o playa”, concluyó el especialista.