La Coordinadora de Empresarios de Gamarra, Susana Saldaña envió una carta al alcalde de la Municipalidad de La Victoria, George Forsyth, en la que expresa su preocupación por la crisis que atraviesa el emporio y por la cual presenta algunas propuestas que podrían dinamizar el comercio en el conglomerado.
En ese sentido, solicitó la apertura de las rejas en los 32 ingresos que tiene Gamarra, ya que son pocos los ingresos y salidas habilitadas, convirtiéndose de esta manera en el principal obstáculo en el reinicio de las labores comerciales en Gamarra, que como se recuerda no se han reactivado ni el 30% de negocios.
Por tal motivo, Saldaña indica que se debe de incentivar el flujo natural del negocio de los empresarios, tomando conocimiento de que Gamarra tiene una actividad productiva y comercial de producción y venta minorista y mayorista.
También sugirió que se establezcan horarios para la carga y descarga de producción ya que es un centro de venta y producción al por mayor y menor en donde los empresarios ofrecen telas, producen y venden prendas terminadas, servicios e insumos a empresarios de todos los tamaños y público en general a nivel nacional e incluso al extranjero, la cual no se ha tenido en cuenta esta realidad, y los agentes municipales han informado que la carga y descarga se debe realizar de las 23:00 horas a las 04:00 horas.
Para ello, sugiere que se definan las zonas de carga y descarga en horario diurno y nocturno tomando en cuenta y priorizando la necesidad y realidad de los empresarios de Gamarra, las cuales son las siguientes:
Finalmente, Saldaña pidió que la erradicación del comercio ambulatorio ilegal e informal de los exteriores de Gamarra, ya que según explica, generan problemas de acceso no solo de los clientes y usuarios que llegan a adquirir sus productos y servicios, sino también de los empresarios y comerciantes que laboramos en el damero.
“Los ambulantes informales e ilegales, sin el menor distanciamiento social, sin protocolo de bioseguridad alguno y sin requisas de facturas, documentos ni bolsas de productos están vendiendo prendas que no pagan impuestos al país ni a la comuna y convierten al damero de Gamarra y sus alrededores en un foco de contagio de Covid-19, exponiendo la vida de ellos mismos, de sus familias y de los clientes y usuarios que no tienen ningún vínculo con ellos pero que se ven afectados por estos actos de exposición al peligro de contagio, hoy declarados como delitos”, finalizó.
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