Luego que el gobierno de Estados Unidos presentara 16 cargos de conspiración de conspiración contra Huawei, la empresa de telecomunicaciones respondió señalando que se trata de una persecución política, además de que las acusaciones se basan en disputas ya resueltas.
“Durante mucho tiempo, el gobierno de los Estados Unidos ha utilizado la fuerza de toda una nación para perseguir a una empresa privada”, señala la compañía china, añadiendo que se han utilizado distintas herramientas para interrumpir sus operaciones comerciales.
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“Raramente se ha visto este tipo de ataque antes en la historia. (…) Esto es persecución política, simple y llanamente”, expresó Huawei.
Detalló que los cargos no tienen un contenido novedoso, sino que “se basan en gran medida en disputas civiles resueltas de los últimos 20 años. (…) Ningún tribunal ha encontrado que Huawei haya cometido un robo malicioso de propiedad intelectual de otros. El Departamento de Justicia de los Estados Unidos está reintroduciendo casos civiles previamente resueltos como casos penales”.
La empresa china mencionó casos de demanda de propiedad intelectual en el que estuvieron involucradas compañías como Apple y Samsung, indicando que se tratan de disputas “que son comunes en toda la industria”, pero que la intención de Estados Unidos es “desacreditar y manchar la reputación” de Huawei. “Ellos quieren dañar la ventaja competitiva de Huawei en el mercado global”.
“Ninguna empresa puede convertirse en un líder global robando a otros. A fines de 2018, a Huawei se le habían otorgado 87,805 patentes, incluidas 11,152 patentes en los EE. UU. Desde 2015, Huawei ha recibido más de US $ 1.400 millones en ingresos por licencias. Simultáneamente, hemos pagado más de US $ 6 mil millones en regalías por el uso legítimo de las patentes de otras compañías. Casi el 80% de esa cantidad se pagó a empresas estadounidenses”, añadió.
“Ninguno de nuestros productos o tecnologías se ha desarrollado mediante el robo de secretos comerciales”, expresó la compañía, indicando que su desarrollo se debe a la inversión que realizaron en I+D.
“Atacar a Huawei no ayudará a Estados Unidos a mantenerse por delante de la competencia. Repetir una mentira no lo hará realidad. Creemos que el tribunal tomará una decisión justa basada en hechos y pruebas”, señaló.