Ante el anuncio de una nueva marcha en Lima contra una posible privatización de Sedapal, el presidente de la empresa de agua potable, Francisco Dumler, se pronunció y descartó nuevamente que la empresa se privatice.
En un comunicado, señaló que “el problema no es si una empresa es pública o privada, sino cómo, a través de esa institucionalidad, haces que se universalice el servicio del agua potable, con las características de calidad, cantidad y sostenibilidad”, aseveró.
Indicó que una de las razones por las que no es viable una privatización es la política de redistribución de acciones de Sedapal. “No se ha podido establecer una política de dividendos, dada la constante rotación de directores. Un inversionista interesado espera el retorno de su inversión”, comentó.
Asimismo, habló de la licencia social que ha firmado la empresa. “Las comunidades de las cuencas altas de donde Lima se provee de agua exigen una compensación (licencia social de Sedapal), a fin de contar con servicios básicos de agua potable y servicios ecosistémicos (siembra de agua). Que podría ser una dificultad hacerlo con la empresa privada”, dijo.
Dumler afirmó que el modelo estatutario de Sedapal está definido como empresa pública. “Modificar esta naturaleza cambiará el objeto jurídico y demandaría trámites complejos y de larga duración”. Añadió que lo importante es ampliar la cobertura del servicio de agua potable y que este sea de buena calidad y a precio razonable.
Para la secretaria general del sindicato de trabajadores de Sedapal (Sutesal), Luisa Eyzaguirre, mientras exista el decreto que permite la privatización de empresas públicas (entre ellas, Sedapal), existe el riesgo.