Jorge Jiménez Bustamante
Si es que Luis Fabián Artime es elegido presidente del club Atlético Belgrano, buscará “Belgranisar Córdoba”. El ídolo no acepta que algún hincha local diga que prefiere ver en la cancha a un equipo de la capital u otra provincia. “Luifa”, en conversación con el La República, propone que en Arequipa todos apoyen al FBC Melgar y nada más.
El argentino brilló con la camiseta “Rojinegra y Celeste” en el año 2002 en el que con 24 goles y 46 partidos jugados fue el mejor delantero. Decimos “Celeste” porque en ese tiempo, por iniciativa de él, el equipo arequipeño jugó con una camiseta de ese color y con cintillos rojo y negro.
En medio de la Pandemia por el COVID - 19 y la campaña con su equipo denominado “Belgrano Primero” recordó gratos momentos en el Perú y envió varios mensajes.
*¿El mensaje que das en Córdoba está dirigido a identidad y al regionalismo?
Arequipa es muy parecido a Córdoba. Arequipeños y cordobeses tienen un lazo de amor propio y de amor a su tierra. Porqué tendrían que ser hinchas de otro equipo. Créeme que hay que participar para cambiar las cosas, hay que involucrarse sino es mejor no criticar. El hincha debe participar de la vida activa del club. Aquí hay que lograr que todos sean de Belgrano y en allá hacer fuerte la frase “Melgar es Arequipa”.
*¿Todo indica que serás el presidente de Belgrano, cuál es tu primer objetivo?
Si recibimos el honorable voto del socio trataremos de plasmar el proyecto que tenemos. Hoy Melgar es un equipo de los más importantes del Perú en cuanto a lo deportivo, eso me gustaría hacer con Belgrano que hoy está en la “B” nacional. Porqué un equipo de provincia no puede estar arriba peleando títulos. Quiero volver a primera división cuanto antes y pelear siempre arriba.
*¿Qué te motiva a postular a la presidencia del club?
Terminé mi carrera en Córdoba. Fui siempre un jugador comprometido en donde estuve. Siempre me puse la camiseta y la defendí a muerte dentro y fuera de la cancha, más acá en Belgrano que me llevó a ser un jugador profesional y mucho más. Estoy buscando un cambio. Involucrarse es muy sano.
*¿Cabría la posibilidad de firmar convenios con Melgar?
Por supuesto. Más si en el comando técnico me conocen. Podríamos hacer intercambios. Ojalá podamos unir lazos. Con Melgar podemos hacer préstamos, intercambiar jugadores, prestarlos, tener experiencias. Hay que tender puentes por todo el mundo.
*En el 2002 el destino te trajo a Arequipa. ¿Porqué no fuiste a Asia?
Yo tenía que irme a China. Tuve un problema con el pasaporte vencido y me complicó la llegada. La realidad es que Melgar me abrió las puertas cuando se me complicaba jugar porque era el único país que tenía abierto el libro de pases. Siempre lo tomé con mucho respeto, me lleva el DT Carlos Biassuto quien significó mucho para mi carrera es lo máximo. Luis “Puchito” Flores y Carlos Daniel Jurado también me enseñaron mucho.
*Fuiste el goleador querido, miles pedían que te quedes. ¿Porqué no renovaste por lo menos un año más?.
No me quedé en Melgar porque quería dejar el fútbol, retirarme jugando en Atlético Belgrano. Tuve ofertas de otros clubes de Perú pero si me quedaba allá era solo en Melgar. Mi retiro estaba cerca y quería hacerlo con la camiseta de Belgrano. Pasé un año espectacular en una ciudad hermosa. Abrir la ventana de mi casa y ver el Misti era la mejor postal de todas las mañanas. Melgar está en mi corazón y ser el goleador es muy importante para mí. Me siento un arequipeño más y mi familia igual.
*José Albornoz y Carlos Bustos son de Córdoba, hoy están en el comando técnico melgariano. ¿Qué opinas?
Los conozco como muy buenas personas y profesionales. Jugué con Pepe Albornoz aquí y es un grande. Hoy la Pandemia por el COVID - 19 los frustra un poco pero quiero hacerles llegar mis respetos y saludos. Uno que tuvo la suerte de jugar con la camiseta de Melgar, que hoy haya argentinos representándonos allá, es importante.
*Albornoz contó que gritabas los goles en las prácticas como si fueran los de una final por el título.
Siempre fui de gritar mis goles. El éxito en el fútbol es llegar al gol. El objetivo del trabajo es el gol, era una forma de decir lo logramos el objetivo. Me daba confianza y la idea era hacer del gol algo común en mi vida.
*¿Cuáles son los tantos más recordados o especiales con Melgar?
En mi debut en Arequipa, el 3 de marzo del 2002, le hice tres goles en el Clásico del Sur ante Bolognesi. Ingresé en el segundo tiempo y volteamos el partido 3-2. Inolvidable. Recuerdo un gran partido del arquerazo “Pancho” Pizarro y se me viene a la mente Félix Escuza que lamentablemente falleció. Allá también me marcaron los largos viajes, tres días fuera de casa conociendo el hermoso Perú.
*¿Fueron pases de Marco Valencia, tu cómplice en el gol?
¡Qué pegada!. Conozco muy pocos que tengan la pegada de Marco, que impresionante que calidad. Seguro que fueron sus pases. Sé que hoy entrena a menores, Ojalá que les enseñe a jugar como él. Lo que le falta al jugador peruano es el covencimiento de que puede ser mejor que argentinos o brasileros, inclusive. Gareca los ha convencido que son grandes jugadores Lo que les puede faltar es que se la crean.
*¿Qué les dices a los hinchas que te aprecian?
A todos que se cuiden mucho, que están en mi corazón. Que todos vamos a salir de la Pandemia por el Coronavirus, esto no hará más humanos y más fuertes.
LA GESTA DE JUNIO DEL 2002
Corría el mes de junio del 2002. El presidente Alejandro Toledo había anunciado la privatización de las empresas eléctricas en Arequipa y la ciudad se levantó, protestó e hizo retroceder al gobierno. El día en que se inició la “Gesta” fue el 14 de junio. Luis Fabián Artime había terminado de entrenar en el estadio Miguel Grau de Paucarpata, eras las 11 de la mañana, todo estaba paralizado, no había transporte, no tenía como volver a su domicilio en Cayma.
Junto a sus compañeros en Melgar supieron que solo el andar podría devolverlos al centro de la ciudad y luego a sus respectivos distritos. El goleador caminó casi 10 kilómetros junto a al Brasileño Paulo Cruvinel, el uruguayo Mauricio Martínez y Jorge Espejo.
“No lo olvido más, Arequipa se puso de pie, dijo no y el gobierno retrocedió. Hubo un poco de miedo como extranjero pero vi toda una ciudad levantada diciendo no. Sentí el nacionalismo del arequipeño, el peruano y su sentimiento, cuando canta el himno se lleva la mano al corazón es muy emocionante. Así es Córdoba, es una provincia muy suya, cuando habla Córdoba, Córdoba se escucha en todo Argentina”.