Ayer, el Perú amaneció con sol. Este país que, a pesar de su belleza, muchas veces parece verse congelado en el tiempo, despertó con el logro de una peruana que nunca supo el significado de detenerse. Gladys Tejeda corrió con alma, vida y corazón en la Zurich Maratón de Sevilla y aseguró un cupo en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, certamen que verá nuevamente flamear la bandera peruana en su disciplina más emblemática.
Antes de conseguir esta clasificación, Gladys Tejeda ya era un símbolo de esfuerzo y dedicación en nuestro país. Los Juegos Panamericanos Lima 2019 nos permitieron compartir con ella el camino que una aleta de élite debe recorrer para la obtención de un triunfo. Ella nos regaló la medalla de oro, pero el ejemplo que dejó fue mucho más significativo.
Pero lo que para nosotros fue festejo y algarabía total, para ella era solo un paso más hacia un objetivo más grande, el mismo que con la marca registrada ayer ya ha conseguido. Tejeda alcanzó registrar un tiempo de 2 horas, 27 minutos y 8 segundos en los 42 kilómetros, que significaron la maratón más llana de Europa, pulverizando la marca solicitada para acudir al certamen olímpico y superando su propio récord personal.
Gladys alcanzó el puesto 6 de la competición, solo detrás de Purity Changwony, Josephine Chepkoech, Sifan Melaku, Gada Bontu y Juliet Chekwel, quien se adjudicó la medalla de oro con un tiempo de 2 horas, 23 minutos y 13 segundos. Estos resultados hacen de nuestra fondista la sudamericana mejor ubicada en una tabla dominada por atletas africanas.
“Me siento muy contenta, quiero agradecer a todo el pueblo peruano por brindarme su confianza y sus muestras de cariño. Me han dado mucha fuerza durante días anteriores y ahora igual. Se ha logrado el objetivo principal que es clasificar a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y mejorar mi tiempo personal”, señaló Tejeda con una tranquilidad que no se condice con el de una persona que acaba de volar a través de 42 kilómetros en menos de dos horas y media.
“No quiero defraudarlos”, agrega Tejeda sin saber que su solo esfuerzo ya nos llena de orgullo. Y es eso tal vez lo que la hace una figura tan grande en nuestro país, su humildad no le permite darse cuenta de lo influyente que puede ser y que en cada carrera en la que participa lleva la voz de 33 millones de peruanos consigo.
Cuando tenía 10 años participó en una competencia con un par de zapatillas que no eran de su talla. Su familia atravesaba una complicada situación económica y su madre tuvo que prestarse el calzado para que ella pueda correr. Gladys quedó en segundo lugar y hasta hoy piensa que con las zapatillas correctas hubiera ganado.
Esta vez, Gladys tuvo que remontarse 24 años en el pasado para aplicar la misma “estrategia”, aunque ahora verdaderamente planificada. La corredora nacional utilizó un calzado especial en Sevilla, zapatillas de diferente talla y color. Un scan en sus pies reveló que su desempeño podría mejorar si usaba una talla diferente en cada uno de ellos. El resultado: un sueño más cumplido.
- Gladys Tejeda participará en sus terceros Juegos Olímpicos de manera consecutiva, la única fondista peruana en conseguirlo. Ya antes acudió a Londres 2012 (puesto 43) y Río de Janeiro 2016 (puesto 15).
- Con los números obtenidos en Sevilla, Tejeda superó su marca personal y se acercó al récord sudamericano (2 horas, 26 minutos y 48 segundos de Inés Melchor).